Meghan Markle habría roto el protocolo real de nuevo, apareciendo en vestido que muestra los hombros
Cada atuendo ausado por Meghan Markle queda registrado como ganador en el diario de estilo de la hermosa Duquesa de Sussex.
La llegada de Markle a la Familia Real se convirtió en un suceso sin precedentes, y todo gracias a que llegó a cambiar años de tradición y protocolo, según reseñó The Sun.
Una muestra de ello es el atuendo que lució en su primera “Trooping the Color”, evento realizado para conmemorar el cumpleaños 92 de la Reina Elizabeth.
Markle llegó acompañada por su esposo, el Príncipe Harry, en un carruaje tirado por caballos, luciendo como toda una Princesa, con una creación de la diseñadora venezolana Carolina Herrera.
La mujer de 36 años rompió el reglamento real con un vestido sin hombros en el famoso balcón del Palacio de Buckingham, en la ceremonia oficial de cumpleaños de la Reina.
Como explica The Sun, los miembros de la Realeza tienen una colección de reglas de etiqueta que les dice cómo vestirse.
Para las mujeres, estas implican que deben usar sombreros para los Compromisos Reales, la Reina debe usar guantes, además de que en las ocasiones casuales se considera apropiado el uso de un vestido de día o pantalones combinados con una chaqueta o un cárdigan.
Aunque el vestido de melocotón de Markle se veía impresionante, se consideró demasiado revelador para la ceremonia, ya que no estuvo en línea con el protocolo de vestimenta, aseguró la reseña de Express.
Las mujeres de la Familia Real tradicionalmente usan mangas largas para el Trooping the Color, pero la nueva Duquesa deslumbró con sus largos mechones de cabello oscuros cayéndole por encima de los hombros desnudos.
Mientras tanto, Kate, Duquesa de Cambridge, optó por un elegante vestido azul claro hasta la rodilla, con los hombros y el pecho cubiertos, mientras que su suegra, la Duquesa Camilla, tenía un traje del mismo color.
Pero cualquiera que sean las normas dictadas por el protocolo, en las pocas apariciones de Markle, se deja ver claramente que ella aún controla su propio guardarropa.
Después de todo, las reglas de la moda están hechas para romperse.