Kiko Matamoros revela el "generoso" regalo que preparó para la boda de su hijo
Luego de tantas dudas sobre si ir o no a la boda de su hijo, el presentador de 'Sálvame' acudió al avento y no llegó con las manos vacías.
Kiko Matamoros asistió a la boda de su hijo, Diego con Estela Grande, celebrada el pasado 13 de julio en la Finca Prados Moros, en la localidad madrileña de Guadarrama y al consultarle sobre le regalo que les llevó, el español respondió: "Mi asquerosa presencia".
Igualmente dijo que acudió a la ceremonia para estar tranquilo con él mismo y para que no le quedara la pena de no haber visto a su hijo casándos. Así lo publicó Diez Minutos.
El presentador le detalló a los medios que solo se quedaría para el acto inicial, pero que no permanecería en la celebración de las nupcias.
"No me quedo a cenar, vengo a desearles suerte y a darles un beso y me voy porque han visto mucho más".
De acuerdo a lo declarado por Kiko, su hijo Diego no sabía -al menos por él- que su padre acudiría a su boda, pues fueron muchos meses de indecisión en el que no reveló que estaría presente en el evento.
La ceremonia acogió a unos 110 invitados, pero la sopresa del día fue la presencia de Kiko Matamoros quien se decidió a último momento y acompañó a Diego en su día especial, dijo Mujer Hoy.
Kiko, que asistió sin Makoke y sin la hija de ambos Anita, saludó a su exmujer Marian con un beso en la mano que la tendió ella, aunque el hizo ademán de darle dos besos.
"Todo fue fenomenal y muy respetuoso, todos estaban felices", afirmó su actual mujer en 'Viva la vida'. "Yo le veía que estaba mal y nervioso. Le dije que la vida son dos días y que si iba, no se iba a arrepentir nunca pero que si no iba sí se podía arrepentir", añadía Makoke.
La madrina fue la hermana del novio, Laura Matamoros (25), que supuso un paso más en la reconciliación de los hermanos. Vestida de la firma Rosa Clará, estaba muy feliz por acompañar a Diego en ese momento tan especial, publicó Divinity.