La mejor receta de sangría blanca preparada con vino y frutas

Siendo ligera, refrescante y una bebida fácil para el verano, la sangría de vino blanco es una forma fabulosa de entretener con estilo.

Si bien esta receta que The Spruce Eats nos trae es muy simple, hay muchas maneras en que puedes adaptarla a tu gusto personal, así como a las frutas de la temporada en la que te encuentres.

Las sangrías son fáciles de preparar y aún más fáciles de beber, y cada receta que se encuentra por ahí ofrece una aventura de sabor única.

Los amantes del vino blanco disfrutan de los sabores frescos de frutas cítricas, manzanas y frutas tropicales que destacan por la acidez del vino. Aunque, si deseas darle un toque tropical rápido a tu bebida, puedes agregarle mango, piña y kiwi.

Para hacer una bebida perfecta para el verano, necesitarás los siguientes ingredientes

• 25 onzas / 750 ml de vino blanco
• 2/3 taza de azúcar blanco
• 3 naranjas, cortadas en cuñas (o 1 taza de jugo de naranja)
• 1 limón (cortado en cuñas)
• 1 lima (cortada en cuñas)
• Opcional: 2 onzas de brandy
• 2 tazas (1/2 litro) de ginger ale o agua carbonatada
  

  Imagen tomada de: Shutterstock

¡Ahora viene la mejor parte!

• Vierte el vino en una jarra.
• Exprime el jugo de las cuñas de los cítricos dentro del vino. Luego introduce las cuñas sin semillas.
• Agrega el brandy y el jugo de naranja -si optaste por usarlos-, así como también el azúcar.
• Revuelve muy bien para asegurarte de que todo el azúcar se disuelva.
• Deja la mezcla en reposo durante la noche para que todos los sabores frutales se junten.
• Agrega el ginger ale o el agua carbonatada justo antes de servir, para que la sangría conserve el gas.
  

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Si vas a servir la sangría de inmediato, usa vino blanco frío y sírvelo en un montón de hielo. Es preferible preparar sangría la noche anterior. ¡Notarás una diferencia significativa en el sabor!

Sin duda, esta complejidad es la firma de una sangría bien hecha.