Soldado no puede contener las lágrimas al conocer a su bebé recién nacido por primera vez
Sin duda la labor de los infantes de marina es una de las más difíciles por su trabajo y ausencia en su familia.
Los infantes de marina se van por largos periodos de su casa y dejan a sus familias para hacer una labor invaluable para las naciones.
En esas misiones a veces se pierden de eventos importantes que suceden al interior de sus hogares. Por eso, la historia de Cpl. Brandon Crespo, que regresó de una misión de 6 meses para encontrar una sorpresa en casa, nos arrancó lágrimas.
Crespo estuvo en un despliegue de seis meses y a su regreso fue recibido por familiares y amigos. Pero no solo ellos estaban allí, sino la persona más importante de su vida que aún no lo conocía.
Noah, su hijo de un mes de nacido, esperaba en los brazos de su madre con un cartel que decía: "¡Fuera de mi camino! ¡Conozco a mi papá hoy!".
Brandon caminó hacía ellos y antes de que pudiera tomarlo en sus brazos dejó caer su sombrero y rompió a llorar.
Sus lágrimas no dejaban de caer mientras sostenía a su bebé en sus brazos por primera vez. ¡Un momento digno de guardar con todo el amor!.
Está historia nos recuerda a la del primer teniente Jason Wagner de Simpsonville que cruzó las puertas de seguridad en el Aeropuerto Internacional de Greenville-Spartanburg para sostener a su bebé Evelyne, de 3 meses, por primera vez.
Wagner regresó de un despliegue de nueve meses a Afganistán, donde estaba destinado en la Base Aérea de Bagram, él no pudo llegar a casa para el nacimiento de su hija, así que hizo la siguiente mejor cosa; lo observó a través de FaceTime.
Fuente: Pxhere
Luego, tres largos meses de espera, salpicados por chats de video varias veces a la semana. Hasta que el día tan esperado llegó y emocionó a todos los presentes.
Sin duda, el regreso de estos héroes es un gran acontecimiento. Por eso, ellos también idean formas innovadoras de volver a casa.
Así lo hizo el sargento de primera clase Terry Gottke, quien no ha visto a sus hijas en un año debido a su despliegue en Afganistán, y él quiso sorprenderlas con su regreso a casa.
Gottke se vistió con todo el equipo de bombero en la estación de bomberos y sus compañeros lo llevaron a su casa con las sirenas encendidas. Desde su hogar familiar, Brittany y sus dos hijas, Tawny, de 7 años y Brea, de 5, pudieron escuchar las sirenas que se acercaban.
¡La complicidad de mamá hizo más grande la sorpresa!