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Mamá rechaza quimioterapia para hijo terminal. Ahora acusa al Estado de secuestrarlo

Nicholas Gundersen de 13 años es un niño con cáncer que junto a su familia pide el cese de su quimioterapia, pero el hospital se niega y un juez lo apoya con una sentencia.

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Candance Gundersen reclamó que el gobierno secuestró a su hijo al obligarlo a seguir con la quimioterapia, a pesar de tener el cáncer en remisión.

“A menos que continúe con el tratamiento esas células (cancerígenas) pudieran volver y con resultados fatales”, dijo un portavoz de la Universidad de Nueva York, hogar del hospital donde Nicholas recibe tratamiento informó Mirror.

Hasta 40 meses más de quimioterapia le recomienda el hospital para poder dar por vencido al cáncer del niño de 13 años.

Imagen tomada de: nbcnewyork.com

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"No necesito quimioterapia porque no tengo más cáncer en mi cuerpo” declaró Nicholas.

EL ESTADO DECIDE SOBRE EL NIÑO

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En su momento Candance decidió parar la quimioterapia del niño optando por métodos menos convencionales, y más naturales; lo cual llevó a los Servicios de Protección Infantil del Condado de Suffolk a tomar la custodia de Nicholas, señaló NBC.

Imagen tomada de: nbcnewyork.com

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Me preocupa mucho que el gobierno básicamente haya secuestrado a mi hijo", dijo Candace Gundersen, que no descansa en su intento de recuperar la custodia de su hijo.

"El juez no está escuchando los derechos constitucionales de estos padres", dice el abogado de la familia Elliot Schlissel.

Imagen tomada de: nbcnewyork.com

Imagen tomada de: nbcnewyork.com

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A la salida del juzgado había partidarios de la familia Gundersen con camisetas con el enunciado ‘justicia para Nick’.

UNA LUCHA POR PARTIDA DOBLE

La Familia Gundersen lucha sin cuartel para vencer en dos frentes, por la salud de Nicholas y por recuperar su potestad.

Imagen tomada de: nbcnewyork.com

Imagen tomada de: nbcnewyork.com

El cáncer hasta ahora está vencido, pero la potestad del niño aún está lejos de resolverse. Sin embargo, la familia no descansará hasta que Nicholas esté junto a ellos nuevamente.

Nicholas está ganando su batalla contra el cáncer, a diferencia de un par de niños en Bélgica, que con solo 9 y 11 años de edad, decidieron dejar de luchar y pedir la eutanasia, la cual se les fue concedida.

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