Niña de 9 años se suicida por acoso escolar

Los padres de la niña que se quitó la vida están expresándose en contra del acoso escolar y las peligrosas consecuencias que conlleva.

Eugenia y Jimmie Williams, los padres de Madison "Maddie" Whitsett, de nueve años, han culpado al suicidio de su hija de una combinación de acoso escolar y el medicamento para el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH, por sus siglas en inglés) de Maddie.

La estudiante de cuarto grado fue encontrada muerta después de que ella misma se colgara en el armario de su habitación. Su madre la encontró y la llevó inmediatamente a un hospital, donde murió tres días después.

Jimmie, quien es su padrastro y funcionario del Servicio de Rescate y Fuego de Birmingham, dijo al medio de comunicación que nada parecía estar mal con la niña, que siempre estaba llena de vida. Le dijo que incluso estaba emocionada por ir a un restaurante de comida rápida con su madre.

Luego describió los eventos del trágico día: “Maddie amaba a Chick-fil-A y ella corría por la casa. Su mamá me llamó y hablamos por un segundo. Entonces uno de los amigos de [Maddie] llamó y ellos estaban hablando".

Eugenia llamó a su hija diciéndole que era hora de ir al restaurante. Sin embargo, no hubo respuesta de ella. Así que la madre confiada fue a la habitación de Maddie y fue testigo de la conmovedora visión.

Más tarde, los padres se dieron cuenta de que Maddie había sido víctima de acoso por parte de otros niños ese día.

"Hablamos con uno de sus amigos y dijo que Maddie tuvo un mal día", contó Jimmie. El amigo dijo que Maddie fue intimidada y se veía triste".

Eugenia y Jimmie ahora esperan animar a otros a evitar una situación tan trágica. Han instado a los niños a que hablen con los adultos cada vez que los acosan o son testigos de que alguien más está siendo intimidado.

Jimmie también opinó que la intimidación podría ser solo la mitad del problema que llevó a Maddie a su muerte. Explicó que unas pocas semanas antes de suicidarse, Maddie había empezado a tomar un medicamento para su TDAH que incluía los pensamientos suicidas como efecto secundario.

Los padres en duelo ahora desean animar a otros padres a vigilar a sus hijos más de cerca para detectar las señales de advertencia desde el principio.

En agosto, otro niño de nueve años de Denver también murió por suicidio en su propia casa después de sufrir acoso escolar. La madre con el corazón roto admitió más tarde que no tenía idea de que su hijo estaba siendo intimidado.

Lamentablemente, la intimidación es una experiencia común para muchos niños pequeños. Mientras que algunos logran pronunciarse en contra de eso, otros recurren a medidas más trágicas después de estar emocionalmente perturbados.