El Rey advierte sobre frágil coexistencia en España en su tradicional discurso navideño
En su mensaje navideño, Felipe VI instó al consenso político y al respeto exigido en la Constitución, llamando a hacernos responsables del futuro.
Felipe VI, el Rey de España, ha dado el tradicional discurso navideño del jefe de estado al pueblo español. En su discurso, el mandatario apeló al espíritu de la transición, que hace 43 años permitió fundar la democracia en España.
Aprovechó además para definir reglas comunes para garantizar la convivencia en el futuro en España.
"Es el mayor patrimonio que tenemos. La obra más valiosa de nuestra democracia y el mejor legado que podemos confiar a las generaciones más jóvenes", dijo Felipe VI.
En un año en el que España enfrentó la crisis de soberania de Cataluña. El Rey aprovechó para reivindar los valores inscritos en la Carta Magna, especialmente, la reconciliación.
También recordó la importancia de la voluntad de entendimiento y la vocación de integración. "Quienes vivieron aquellos años saben bien –ha incidido– que si hay algo que los define fue el valor de trabajar juntos y unidos pensando en nuestro país y en su futuro".
Tres días antes del mensaje, el Rey sostuvo una reunión con el Presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, y el Presidente de la Generalitat, Quim Torra. Esto atrajo fuertes críticas del PP y Ciudadanos.
No se expresó específicamente sobre Cataluña, pero dijo que "debemos hacer todo lo que esté en nuestras manos para que esos principios (de democracia y libertad) no se pierdan ni se olviden, para que las reglas que son de todos sean respetadas por todos".
Desde el 2014, cuando ascendió al trono, Felipe ha enfrentado desafíos secesionistas que han enmarcado sus discursos navideños. En 2017, tras el referéndum catalán, llamó a "afrontar los problemas que afectan a todos los catalanes".
La crisis catalana continúa en 2018 a pesar del cambio de Gobierno, y el Rey apeló al consenso entre fuerzas políticas, diciendo que la superación "nunca puede nacer de la división, ni mucho menos del enfrentamiento".
El Rey recordó también que cuando la Carta Magna iba a ser firmada, los líderes políticos lograron un entendimiento "a pesar de estar muy distanciados por sus ideas y sentimientos".
Llamó a una convivencia basada "en la consideración y en el respeto a las personas, a las ideas y a los derechos de los demás", algo que "exige el respeto a nuestra Constitución; que no es una realidad inerte, sino una realidad viva que ampara, protege y tutela nuestros derechos y libertades".
"Todos los proyectos necesitan unos cimientos sólidos, y la España de hoy los tiene, porque están hechos de una voluntad decidida de concordia, de paz y de entendimiento"
El mandatario también habló sobre la juventud, instando a construir un mejor país, más "cohesionado" socialmente y "comprometido" con igualdad entre hombres y mujeres. Advirtió que "somos responsables de su futuro y las circunstancias de hoy en día no son, ni mucho menos, las más fáciles".
Habló de las altas estadísticas de desempleo en menores de 30 años. También se refirió a temas como la educación, corrupción y terrorismo. El terrorismo recientemente ha dado mucho de qué hablar en España.
Hace poco, una peligrosa terrorista estaría "reclutando bombarderos suicidas para atacar España". Samantha Lewthwaite, de 32 años, se incorporó al Daesh y es una de las sospechosas de terrorismo más buscadas en Occidente.
Fuerzas de seguridad del Reino Unido descubrieron la existencia de amenazas de ataques para este verano que se llevarían a cabo por terroristas suicidas en playas de Canarias y del resto de España, entre otros lugares de Europa.
Responsabilizan de este plan a Samantha Lewthwaite, conocida como la “viuda blanca”