Hombre de 92 años tiene vergüenza de pedir ayuda así que calentaba con el horno su casa helada
La vergüenza no le permitía a este anciano solicitar ayuda y prefería pasar frío y poner en peligro su salud y su hogar.
Después de que un oficial de la policía de Austin encontró que un veterano de la Segunda Guerra Mundial estaba calentando su casa usando sólo su estufa, el Departamento de Policía y la comunidad se unieron para ayudarlo.
"Las comunidades deben volver a ser como eran, no sentándonos cómodos, sino haciendo lo necesario para ayudar al necesitado", dijo Mitchell Larson, miembro del grupo de ciclistas de Wind Therapy Freedom Riders.
Anciano pasaba frío por pena de pedir ayuda-Imagen tomada de YouTube-Kvue ABC
TODOS AYUDARON
Al conocer lo que ocurría con el anciano, el pasado sábado todos se apersonaron en la casa del veterano de la Segunda Guerra Mundial, Louis C. Hicks.
"El Sr. Hicks ha vivido así durante años", dijo Luis Rodríguez, presidente del grupo de motociclistas, quien además agregó que solo son unas pocas horas para poder ayudarlo.
El grupo de más de una docena de personas estaba afuera en temperaturas casi heladas, limpiando la casa para un hombre que vivió una vida de servicio.
Oficiales ayudaron al anciano-Imagen tomada de YouTube/Kvue ABC
Fue difícil para el señor Hicks expresar su gratitud con palabras.
"Agradezco a los estadounidenses en el vecindario por cuidarme", dijo Hicks.
Hicks sirvió en la Segunda Guerra Mundial y ha vivido en el este de Austin desde la década de 1930. No tenía un calentador que funcionara, así que usó una estufa.
El Departamento de Policía de Austin llegó a su casa después de informar de un posible allanamiento, cuando se dieron cuenta de que Hicks estaba luchando por sobrevivir con lo poco que tiene.
La estufa pasaba horas encendida para calentar la casa-Imagen tomada de YouTube/Kvue ABC
Louis atendió las necesidades de su país durante la Segunda Guerra Mundial, pero cuando se trata de atender sus propias necesidades, el hombre orgulloso no pedía ayuda.
APRECIA LO POCO QUE TIENE
"Hay tanto que damos por sentado", explicó Rodríguez. "Hasta que te topas con el señor Hicks, para quien lo poco que tiene es el mundo".
Por ello, la comunidad decidió limpiar su hogar, como un esfuerzo comunitario para ayudar a un ex soldado que arriesgó su vida por las libertades que ahora disfrutan los ciudadanos.
Por fortuna, el anciano fue beneficiado también con un calefactor que le donó el departamento de policía de Austin, para que pueda mantener su casa tibia.
Anciano podrá tener su hogar caliente gracias a la ayuda recibida-Imagen tomada de YouTube/Kvue ABC
DENUNCIA POR ROBO TERMINÓ EN AYUDA
Cuando el veterano de la Segunda Guerra Mundial, Louis C. Hicks, descubrió que faltaban herramientas eléctricas del cobertizo detrás de su casa, llamó al 911 para denunciar el robo.
Todo lo que quería era que el Departamento de Policía de Austin fuera a atrapar al tipo, pero cuando la oficial Chasity Salazar apareció en su puerta para reunir más información, ella insistió en echar un vistazo rápido dentro de la casa del anciano.
En ese momento, él no tenía idea de que la policía no había terminado con su trabajo de detective y estaba planeando regresar con algo de apoyo para reducir sus carencias.
Louis atendió las necesidades de su país durante la Segunda Guerra Mundial, pero cuando se trató de atender sus propias necesidades, el hombre orgulloso no pedía ayuda.
Afortunadamente, el oficial Salazar vio todas las señales de alguien que necesitaba ayuda desesperadamente y decidió actuar en nombre de sus palabras no expresadas.
ATENCIÓN PARA LA VEJEZ
Los ancianos necesitan y merecen atención para evitar que pasen sus últimos días en condiciones deplorables que le puedan acelerar la muerte.
Por ejemplo, este hombre murió de hambre y frío en una localidad de México.
El cuerpo de un hombre mayor sin vida y en avanzado estado de desnutrición fue encontrado el pasado 12 de diciembre en el sitio conocido por 'El Yongo', monte adentro, 150 metros al Norte del panteón de La Atravesada.
El hombre fue identificado como Roberto Macías, de 63 años de edad, originario de Sinaloa.
En una historia similar, un hombre de 80 años con enfermedad de Alzheimer llamado Jerry Ellingsen fue encontrado vagando solo después de viajar con su pequeño perro de Fort Myers, Florida.
Jerry no sabía dónde estaba ni por qué estaba en Denver.