"No me merezco la nube que hay sobre mí": Ylenia niega tener una relación abusiva con las drogas
La concursante de 'Gran Hermano DÚO', Ylenia Padilla, de 30 años de edad, ha conversado sobre su experiencia con los narcóticos, una etapa difícil y oscura de su vida.
Durante el programa Sábado Deluxe, habló abiertamente sobre los temas más delicados de su vida. La de Benidorm develó un asunto personal que se ha tratado dentro de la casa de Gran Hermano Dúo: las drogas.
Padilla reconoció que, tras alcanzar la fama con Gandía Shore, atravesó una pequeña depresión. Luego comenzó su trabajo en la noche, algo que la llevó a frecuentar malos hábitos.
"Me sobrecargué de trabajo. Te aferras a alcohol, drogas, a cosas así. He fumado porros bastante tiempo de mi vida porque era la única forma de evadirme. La familia es lo más importante y llevarme mal con ellos por dentro no me dejaba vivir”, dijo.
Y continuó: “Es la manera que he tenido de evadirme. Como tenía tanto trabajo, probé otras cosas peores y más teniendo lo que tengo... Y por eso decidí apartarme de todo pudiendo ganar un pastizal", confesó.
De esta manera, la concursante no dejó nada oculto y puso fin a las especulaciones con una entrevista bastante sincera.
"No me merezco la nube que hay sobre mí. A veces se te puede ir de las manos el mundo noche, en ningún momento yo no he tenido una adicción ni he estado enganchada, fue un momento muy corto. No hablé con nadie, fue una decisión que tomé yo sola, no me hizo falta nadie, yo decidí trabajar de día y vivir de otra manera", resaltó.
Vale recordar que, en 2017, Ylenia dio mucho que hablar cuando decidió romper con todos los compromisos profesionales que tenía para el verano y decidió "trabajar de día".
Por otra parte, durante la entrevista también abordó otro tema delicado y que le causa dolor. Se trata de la relación con su padre, Juan Antonio Padilla, quien no se siente cómodo con la exposición mediática de su hija. "Es una pesadilla para mí", declaró hace poco a sus compañeros de “Sálvame”.
Sin embargo, Juan Antonio aprovechó el programa y asistió para pedir perdón a su hija por las cosas malas que había dicho de ella.
La escena, protagonizada por arrepentimiento, provocó el llanto de la invitada y de la propia María Patiño. Sin duda, una noche muy especial para la exconcursante de GH en la que pudo cicatrizar algunas heridas.