Tres chistes de suegras para alegrarte el día
Para tu dosis de risa diaria, hemos reunido tres geniales chistes que cualquiera que haya tenido que lidiar con sus suegros podrá apreciar. ¡Te desternillarás de la risa!
EL BURRO PREMIADO
Mientras Clara cuidaba de Fred, el burro premiado de su yerno, Fred, el marido de su hija, el animal alzó sus patas traseras y la pateó en la cabeza.
Fuente: Giphy
Ella falleció en el acto. A los pocos días ocurrió su funeral, seguido por una recepción en la finca, con la ayuda del sacerdote local. Mientras Fred y el sacerdote estaban de pie lado a lado, sus amigos pasaban uno a uno para darle el pésame tras su pérdida. Pero el sacerdote se percató de algo extraño.
Fred sacudía la cabeza diciendo "no" a todas las señoritas, pero a los hombres, Fred les asentía diciendo "sí". Por curiosidad, el sacerdote preguntó: "¿Porqué le sacudes la cabeza a las mujeres, diciendo que no, y le asientes a los hombres, diciendo que sí?"
"Es simple", respondió Fred. "Las mujeres me preguntan si necesito algo, y digo que no". Aún confundido, el sacerdote preguntó, "De acuerdo, pero, ¿y los hombres?"
"Me preguntaron que si les podía prestar el burro", respondió Fred a secas.
Fuente: Giphy
LA ADICIÓN ERRADA A LA FAMILIA
Un día, un marido recién casado volvió a casa después del trabajo y halló a su esposa muy emocionada. Le sirvió su usual trago de brandy de después del trabajo, y le dijo "¡Te tengo grandes noticias. Muy pronto, vamos a ser tres en esta casa, en vez de dos".
Inmediatamente, su cara de preocupación se convirtió en una enorme sonrisa. Abrazó y besó a su esposa con felicidad y dijo:
"Estoy feliz de que te sientas así, porque desde mañana en la mañana, mi madre se muda con nosotros."
Hombre ríe a carcajadas. | Fuente: Shutterstock.
LA HONESTIDAD DE UN NIÑO
Tras una prolongada ausencia, la abuela de Paul vino a visitar. Paul, encantado por la sorpresa, recibió a su abuela con un enorme abrazo y dijo "Estoy muy feliz de verte, abuela. Ahora quizás papá haga el truco que nos prometió".
El saludo de Paul despertó la curiosidad de la abuela, y ella preguntó: "¿Qué truco es ese, cariño?"
"Escuché a mami y papi hablando", respondió Paul. "Y papi dijo que se treparía las paredes si venías a vernos de nuevo".
Mujer ríe a carcajadas. | Fuente: Shutterstock.
Si bien los niños pueden parecer muy inocentes todo el tiempo, esa inocencia ciertamente los lleva a ser los perpretadores de actos indiscretos que a su vez demuestran lo inteligentes que son.
A continuación te contamos una historia ficticia que no solo te divertirá con un inesperado final, también te hará reflexionar sobre el alcance de la astucia de los niños.