Pilar Rubio y Lorena Gómez: las cuñadas que no se siguen en Instagram
A pesar de que Pilar Rubio y Lorena Gómez fueron buenas amigas en el pasado, hoy en día ninguna sigue a la otra en las redes sociales. ¿Hay bronca entre ellas?
Es bien conocido que Gómez y Rubio son las respectivas parejas de René y Sergio Ramos. La vida las ha convertido en cuñadas pero al parecer, ellas mantenían una amistad en el pasado.
Sin embargo, existen pistas que nos hacen pensar que la relación actual de las cuñadas no es la mejor, La boda de Pilar Rubio con Sergio Ramos traído a colación el tema.
Lorena Gómez, novia de René Ramos desde hace algunos meses, fue una de las invitadas más llamativas en "la boda del año" el pasado fin de semana en la Catedral de Sevilla.
La cantante deslumbró a los presentes con un hermoso vestido color púrpura asimétrico, con un hombro al aire y manga larga. Complementó su look con un flequillo recogido detrás de las orejas.
Gómez llegó al evento acompañada de René, a manera de presentación oficial al público de su relación. La pareja se tomó fotos con varios invitados, pero llamó la atención que no se retrataran con Rubio.
Si bien oficialmente no hay mal rollo entre ellas, es notable que ninguna sigue a la otra en Instagram, a pesar de que hace tan sólo un año Lorena se refiriera a la presentadora como "my friend".
Algo que también ha dado mucho de qué hablar es el hecho de que Lorena no estuviera en la despedida de soltera de Pilar Rubio.
En cambio, Vania Millán, la ex mujer de René Ramos, sí hizo acto de presencia en la despedida. Millán y Pilar son buenas amigas,
Con todas estas señales, no hay duda de que a Pilar no le queda de otra aceptar que Lorena es la novia de su cuñado, y a pesar de sus diferencias tendrá que compartir con ella los momentos familiares.
La boda de Pilar Rubio y Sergio Ramos también ha dado de qué hablar por otras razones.
El programa “Sálvame” consiguió entrevistar de manera exclusiva a un infiltrado, quien asegura conocer a una persona de confianza que trabajó en la planificación de la boda y contó los secretos mejor guardados de la celebración.
Según expresó, los empelados contratados para trabajar en el evento, tuvieron que firmar un acuerdo de confidencialidad, el cual estipulaba que si filtraban información a los medios deberían pagar hasta 100.000 euros a la pareja.