Chiste: Mujer aconseja a técnico no hablarle a su loro
Ser reparador requiere habilidad, diligencia y, lo que es más importante, la capacidad de seguir las instrucciones palabra a palabra.
Las personas que trabajan como reparadores le dirán que sus clientes quieren que el trabajo se realice en un tiempo determinado, dentro de un período de tiempo determinado o de una manera determinada. No seguirlos puede generar una mala crítica, un recorte salarial o cualquier otro tipo de problema.
Un reparador se encontraba en un gran problema después de no seguir las instrucciones de su cliente.
Después de que Laura lavara el lavavajillas, llamó al reparador para que lo arreglaran. Como ella tenía trabajo al día siguiente, decidió dejarle la llave y le dijo:
"Voy a dejar la llave debajo de la colchoneta. Arregle el lavaplatos, deje la factura en el mostrador y le enviaré un cheque por correo".
Un lavaplatos. | Fuente: Pexels
"Oh, por cierto, no te preocupes por mi bulldog, Bob. Él no te molestará. Pero, hagas lo que hagas, bajo NINGUNA circunstancia, ¡hables con mi loro! ¡Repito, no hables con mi loro!
El hombre pensó que era una instrucción bastante extraña, pero no insistió mucho en eso.
Un bulldog. | Fuente: Pixabay
Un técnico. | Fuente: Pixabay
El loro respondió: "¡Dale, Bob!"
Un loro en una jaula. | Fuente: Pixabay
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