Flavio César: galán de los años 90 que dejó de actuar para hacerse cantante cristiano
Algunos han alcanzado el éxito y fama a través de su trabajo en las pantallas o en la industria musical. Pero luego, usan esa misma plataforma para hacer grandes cambios en sus vidas y enviar mensajes trascendentes a quienes les siguen. Es el caso de Flavio César.
“Juguemos a cantar”, fue el primer proyecto en el que el actor y cantante, ahora dedicado a la música cristiana, participó y a medida que iba creciendo, a la par de proyectos televisivos se iba adentrando en la música, llegando a combinar ambas, señala Univisión.
Fue durante los años 90 que participó en la agrupación “Clase 69” y luego tendría éxito como solista, con el lanzamiento de un álbum homónimo y el exitoso sencillo “En cada canción”. Las miradas estaban sobre él y así vendría llegando su primer protagónico.
Conformó junto a Natalia Esperón la pareja juvenil de la telenovela “Agujetas de color rosa”, en el año 1994. Este dramático tuvo 300 episodios y fue todo un éxito entre el público joven y le daría reconocimiento mundial, al ser visto por millones de fanáticos en México, Colombia, Perú, España y Argentina, entre otros.
La música, claro está, no quedaba de lado, por lo que fue parte de la banda sonora de esta, cantando el tema “Inolvidable”. El disco fue un éxito rotundo en ventas. Un año después ganaría como mejor actor revelación en los “Premio TVyNovelas” y hoy, sigue siendo amable con los fans que le recuerdan y reconocen.
César continuó conquistando fans con su música y construyendo hits, con los álbumes “Mediterráneo” y “Qué será de mí”. Se retiró de la televisión y escenarios por un tiempo y cuando lanzó su cuarto álbum, en 2001, no tuvo mucha receptividad.
Cinco años más tarde, se convirtió al cristianismo y desde ese entonces ha grabado discos con canciones dedicadas a evangelizar, divulgando en su música la palabra de Dios. Aunque hoy en día siguen ofreciéndole trabajo en telenovelas, él los ha rechazado.
En entrevistas, ha dicho que la vida dentro de la industria del entretenimiento y espectáculos le dejaba "un gran vacío".
Flavio, que una vez fue un ídolo adolescente, dedica ahora todo su tiempo a su rol de pastor, esposo y padre, pues ha formado una linda familia que comparte su fe y su misión de llevar la palabra de Dios a miles de personas.
El actor mexicano no ha sido el único que ha cambiado los reflectores de la fama por su fe. Luis Ernesto Franco, por ejemplo, se divorció de Marimar Vega y después de hacerlo público, cambió de religión.
El exesposo de Vega se convirtió en cristiano evangélico después de bautizarse en la iglesia que lleva por nombre Mosaic.
La noticia se conoció a través de las redes sociales, donde se difundieron imágenes de la ceremonia.