Andrea Janeiro Esteban y otros niños estrella que no quieren ser famosos

La fama es el anhelo de muchos pero sin duda no todos la desean. Especialmente quienes se la han topado de frente y se les ha colado en la vida sin más remedio que recibirla. Tal es el caso de algunos hijos de celebridades que quisieran que su día a día no fuera de interés de la prensa rosa.

Para muchos hijos, el cumplir la mayoría de edad de famosos es una etapa que les ha venido con un extra que no solicitaron: una vida en el ojo público. Sus fotos comienzan a aparecer en revistas y se habla de sus amores, estudios y vacaciones como si de personajes públicos se tratara.

Veamos cómo va la vida de estos chicos menores de 30 años que intentan escapar de los reflectores que la fama de sus padres les ha colocado encima, según reseña Divinity.

ANDREA JANEIRO ESTEBAN

La hija de la “Princesa del pueblo” es una de las que más ha sufrido la fama no deseada y, en más de una ocasión, ha pedido que se respete su privacidad.

La joven ha sido noticia desde que fue concebida. Su nacimiento estuvo en la portada de la revista Hola! y aunque la ley del menor obligaba a los medios a cubrir su rostro con pixeles en las publicaciones, todo suceso de su vida siempre ha sido noticia en la prensa rosa.

En búsqueda de una vida más tranquila y privada, se fue a estudiar a Londres, como manera de alejar su día a día de los reflectores y paparazzis que le seguían en Madrid.

LOLA ORELLANA

La familia de Lola Orellana está llena de fama. Es nada más y nada menos que la nieta de La Faraona y la hija de Rosario Flores. La vocación de la joven está orientada hacia la interpretación, ha dicho Rosario.

Lola culminó su bachillerato hace par de años cuando viajó a Londres, Inglaterra, para estudiar inglés a la vez que finalizaba esa etapa de su educación, pues tenía la intención de regresar a su natal España con el aprendizaje de otro idioma.

ALBERTO HERRERA

El chico de la melena larga es hijo de Carlos Herrera y Mariló Montero. Se dedica a sus estudios de Administración de Empresas y Marketing que cursa en la Universidad San Pablo mientras los compagina con sus hobbies: tocar guitarra y los deportes de riesgo.

En cuanto a la fama se refiere, para él no solo es heredada de sus padres. Su hermana Rocío Crusset es una reconocida modelo. Su última aparición pública fue en 2014, cuando acompañaba a su madre en la presentación oficial de su libro “El corazón de las mujeres no tiene reglas”.

ROCÍO FLORES

Otra joven que quisiera no tener su cotidianidad reflejada en la prensa es Rocío Flores Carrasco. Hasta hace poco, la hija de Rocío Carrasco y Antonio David Flores le huía a los medios, esto antes de que su padre se volviera concursante de GH VIP 7.

Flores no mantiene relación con su progenitora, pues considera que ese rol corresponde realmente a la esposa de su padre, Olga. Es a ella a quien ve como su madre. Cuando cumplió la mayoría de edad se fue a vivir con su papá.

ANDREA MOLINA

Particularmente la hija de Micky Molina y Lydia Bosch sigue con la vena artística y talento de la familia. Como intérprete ha sido parte de varios cortometrajes, aunque está alejada de la prensa del corazón.

Andrea no habla de su padre y la prensa recuerda cómo tuvo un incidente con su padrastro que nunca fue aclarado del todo.

ÁLEX LEQUIO

De este joven empresario se sabe más por su perfil en Linkedin que por apariciones en la prensa del corazón. Aunque amable con los medios, se mantiene distante. Todo lo contrario a su comportamiento de chico cuando quitaba los micrófonos a los periodistas que entrevistaban a su mamá, Ana Obregón.

Además de tener una licenciatura y dos másters de universidades estadounidenses, el hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio ha fundado su propia compañía dedicada al marketing, a pesar de su lucha contra el cáncer.

Lo cierto es que lo quieran o no, ser hijos de alguna celebridad siempre los convertirá en personas de interés público e inevitablemente los fanáticos querrán saber y comentar sobre su vida.

Tal es el caso de los niños de famosos señalados por tener los nombres más raros… del mundo. Empecemos con una cantante de potente voz que asombró con su elección de nombres. Es Mariah Carey, quien optó por llamar a sus hijos Marroquí y Monroe, algo que sin duda ha despertado bromas.

Fans de la música estaban atentos al nacimiento de la hija de Beyoncé y Jay-Z, pues se trata de la heredera de dos grandes intérpretes y empresarios de la industria.

Sin embargo, su nombre fue toda una sorpresa y acontecimiento. Blue Ivy, como bautizaron a la pequeña, significa si lo traducimos al español “hiedra azul”.

Pero no solo es ella. Gwyneth Paltrow y Chris Martin nombraron a su primera hija Apple. Sí, así es, la niña de la actriz de Hollywood y el cantante de Coldplay se llama “manzana”. Y cómo olvidar a Nicolas Cage. Es tan fanático de Superman que llamó a su hijo Kal-el. Ingresa aquí si quieres enterarte de más nombres raros en el mundo del espectáculo.