La historia del ascenso y caída de "el pequeño ruiseñor" Joselito

Su éxito duró solo una década, desde los años 50 hasta los 60, pero se extendió hacia muchos países. Hasta que la pubertad tocó a su puerta y todo lo que había logrado se fue a la deriva.

José Jiménez, mundialmente conocido como Joselito, fue un niño de voz de oro hace 60 años. En 2017, cuando tenía 74, aseguraba desde Utiel, el pueblo valenciano en el que vive actualmente, que "yo fui el primer el artista español internacional, mucho antes que Julio Iglesias" y que "cuando la gente pensaba en España se refería a Franco, Joselito o el Cordobés".

El que alguna vez fue un niño prodigio de fama mundial, más tarde en su vida pasó por muchos episodios dramáticos: adicciones, prisión y olvido. Hoy se arrepiente de las dos primeras, pero asegura que desde que dejó eso atrás empezó la etapa más feliz de su vida.

Su éxito duró solo una década, desde los años 50 hasta los 60, pero se extendió hacia muchos países. En Francia sigue conservando seguidores que hasta hace algunos años disfrutaron de su voz mientras cantaba "Ma vie" de Charles Aznavour, una de sus canciones favoritas. Pero dijo que ya no le apetece cantar.

Sus películas algún día lo inmortalizarán, entre ellas ‘El pequeño ruiseñor’ (1956), pues en España siguen siendo repuestas y eso lo mantiene vigente hasta hoy. Esta es la razón por la cual es sorprendido en la calle por jóvenes en vez de adultos, pero eso lo motiva.

Fue la pubertad lo que lo despidió de la fama que conoció a tan corta edad. Sus productores habían intentado alargar su apariencia infantil. No lo lograron. Así que probó suerte con discografías como Joselito adulto, pero estas no llegaron a ningún lado.

ESTAFADO Y SIN UN DURO

Tras el fracaso discográfico descubrió que su mánager de toda la vida lo había estafado. "Me dejó con lo justo para vivir, así que me marché a Angola. Como me gusta cazar allí encontré mi sitio, pero nunca fui mercenario como se ha dicho", expresó, según reseña El País.

Tampoco ha dejado de repetir que podría ser millonario, pues según asegura ganaba 20.000 dólares al día actuando diariamente nueve meses al año hasta casi los 20 años de edad, pero el mánager lo desplumó sin compasión.

Al volver a Untiel en la década de los 80, visitó un local y se vio envuelto en problemas con tráfico de drogas, lo que lo llevó a la cárcel durante cinco años (1991-1996). Al menos en ese lugar superó la necesidad de estupefacientes, pero se alegra porque hoy puede viajar, está sano y por eso asegura que no cambiaría su vida por nada.

El ‘pequeño ruiseñor’ que llegó a actuar en 14 películas que generaron miles de millones de pesetas y que se codeó con personalidades como el presidente de los Estados Unidos, Lyndon B. Johnson, los comunistas Fidel Castro y el Che Guevara, Nat King Cole o Sinatra, es hoy el mismo que solo prefiere andar de paseo por la finca familiar, nadar y viajar.

Parece increíble que alguien que pudo cantar ante Juan XXIII, vender más discos que Elvis Presley y grabar al menos 500 piezas haya descendido como avión en picada.