La princesa Diana y los mitos que la rodean: desde su título real hasta su enemistad con Fergie

Después de más dos décadas de su trágica muerte, algunos mitos continúan rondando a Diana Spencer.

Ella sigue siendo una de las figuras más intrigantes e icónicas de nuestro tiempo, y, al igual que muchas leyendas, existen muchos mitos sobre si vida que en realidad son pura ficción.

La verdadera Diana era una mujer compleja y los hechos sobre su vida son muy interesantes. Algunos de esos mitos los aclaramos a continuación.

“COMÚN” ANTES DE CASARSE CON CHARLES

Se decía que era una persona “común” antes de casarse con el príncipe Charles el 29 de julio de 1981. Sin embargo, Diana estaba lejos de ser común, pues era una aristócrata cuya familia adinerada había sido parte de la historia británica durante siglos.

Nacida el 1 de julio de 1961, de sus padres, el vizconde y la vizcondesa Althorp (Johnnie y Frances Spencer), Diana se convirtió en "Lady Diana Frances Spencer" cuando su abuelo murió en 1975 y su padre se convirtió en el octavo conde de Spel.

La fortuna de los Spencer vino del cultivo de ovejas y del comercio de lana. Un antepasado adquirió un título otorgado por el Rey James I en 1603 y en 1765, un Spencer recibió un condado.

Entre los antepasados ​​de Diana estaban los Caballeros de la Liga, los Consejeros Privados y un Primer Señor del Almirantazgo. La familia también estaba relacionada con los reyes Charles II y James II.

Hablando con Andrew Morton para su biografía, “Diana: Su verdadera historia - En sus propias palabras”, Diana describió su vida anterior a la realeza.

"Tenía un muy buen estilo de vida. Tenía mi propio dinero y vivía en una casa grande. No era como si estuviera entrando en algo diferente", dijo.

SU TÍTULO REAL FORMAL

Cuando Diana se casó con el Príncipe Carlos, pasó de ser Lady Diana Spencer a Su Alteza Real Diana, la Princesa de Gales.

Ella perdió su designación de Su Alteza Real en el divorcio, pero siguió siendo la Princesa de Gales.

"La princesa Diana" fue una creación mediática que surgió inmediatamente después de su boda con Charles y perdura hasta el día de hoy.

LA AYUDA DE CHARLES EN SUS EMBARAZOS

Al igual que Diana, el Príncipe Carlos estaba decidido a tener una relación más cercana con sus hijos que sus padres.

En The Diana Chronicles, Tina Brown escribió que Charles estuvo presente durante las 16 horas de trabajo de parto que Diana soportó al dar a luz al Príncipe William y fue el primer Príncipe de Gales que estuvo presente en el parto.

Según reseñó Diane Clehane en Best Life, Diana dijo en su verdadera historia que Charles amaba la vida de guardería y no podía esperar para darle el biberón a sus hijos.

EL MITO SOBRE NO TENER NIÑERA PARA SUS HIJOS

Aunque Diana odiaba la idea, William y Harry tuvieron una niñera.

Según reseñó International Business Time, la biógrafa real Ingrid Seward dijo en Sunday Night en abril de 2019: "Diana dijo que nunca iba a criar a sus hijos en la forma en que [Charles] fue criado, lo que sería muy distante emocionalmente de sus padres".

Seward informó que Diana luchó por aceptar a la niñera real, Barbara Barnes, por "celos".

Ella afirmó que la princesa llevó a Barnes a renunciar porque "ella se enfrentaba a Bárbara y simplemente se volvió insostenible. Al final, Bárbara tuvo que irse".

SIEMPRE SE COMPORTABA COMO UNA DAMA

En el documental Diana, Nuestra Madre, el príncipe William reveló que su madre tenía "un sentido del humor muy descarado" y que le enviaba "las tarjetas más groseras imaginables" mientras él estaba en la escuela.

Siempre fueron "tarjetas muy embarazosas, muy divertidas, y luego escribía cosas muy bonitas por dentro. Pero no las abría en caso de que los maestros o cualquier otra persona en la clase las viera", dijo el príncipe.

SE DICE QUE SIEMPRE FUE UNA AMIGA LEAL

Podía ser una amiga maravillosa, pero, según la biógrafa real Sally Bedell Smith, Diana inmediatamente se alejaba de las personas sin decir una palabra si la lastimaban.

Quizás el mejor ejemplo de esto fue cuando Diana no habló más públicamente sobre su exmejor amiga Sarah Ferguson, y ni siquiera permitía que se mencionara su nombre en su presencia después de la publicación de las memorias de Ferguson, My Story, sobre su vida como esposa real.

Ferguson se había casado con el príncipe Andrew y el libro salió poco después de que la pareja se divorciara en 1996.

En su libro “Diana: en busca de sí misma”, Bedell Smith informó que la princesa se sintió "traicionada" por la amiga que había conocido desde que eran adolescentes.

Diana se puso furiosa cuando Fergie escribió que era se comportaba de forma "llorosa y solitaria" en ciertos eventos de la realeza y reveló que había desarrollado un caso de verrugas después de usar los zapatos de Diana.

Por su parte, el antiguo mayordomo de Diana, Paul Burrell, informó en su libro “La forma en que éramos: Recordando a Diana”, que la amistad entre ellas terminó para siempre en el verano de 1997 por algo diferente a lo que se había informado anteriormente.

"No tengo la intención de divulgar la razón. Pero la princesa me mostró una carta que le había escrito a Sarah y dejó sus sentimientos muy claros", escribió Burrell, según reseñó Diane Clehane en Best Life.

Paul dijo que Sarah Ferguson "estaba desesperada por hacer las paces", pero Diana "no estaba de humor para la reconciliación". Las dos mujeres nunca volvieron a hablar.