Ana Obregón pasa su cumpleaños aislada y en silencio por su hijo

La actriz Ana Obregón cumple 65 años lejos de las cámaras y de las redes. Atraviesa la lucha de su hijo Álex con el cáncer en un momento difícil como lo es la crisis sanitaria por el coronavirus.

Si el cumpleaños pasado de la actriz había sido, según sus palabras, el “más feliz” de su vida, éste ciertamente transcurre en una nota más baja. Los 65 la encuentran con el estreno de su obra teatral “Falso directo” suspendido para ocuparse de los problemas de salud de su hijo.

Tanto ella como Álex han decidido tener un enfoque optimista sobre la enfermedad, y así lo han demostrado en sus declaraciones públicas de estos últimos dos años.

“Es una cuestión de actitud. Cualquiera que se ponga en mi situación lo entenderá. Las madres sacamos fuerzas de donde aparentemente no las hay. Álex lleva todo con sentido del humor y siempre adelante”, dijo al medio Vanitatis.

Si bien la enfermedad de su hijo, un joven de 27 años, ha revolucionado su vida entera estos últimos dos años, estos últimos días la ausencia de la familia de las redes sociales y de los medios parecen indicar complicaciones.

Es que Álex ha ido documentando en Instagram su experiencia con la enfermedad durante todo este tiempo, pero ahora hace más de diez días que no da señales en su cuenta.

La enfermedad del hijo de Ana Obregón comenzó como un simple dolor de espalda en marzo de 2018, y desde entonces ha hecho periódicas actualizaciones sobre su lucha con la enfermedad.

“Lo prioritario en mi vida es mi hijo y si hay que parar el reloj, se para”, dijo la actriz a Vanitatis, sobre los volantazos de agenda que viene viéndose obligada a hacer.

No tenemos noticias de ella desde el pasado 19 de febrero, cuando publicó en Instagram una fotografía familiar para celebrar el cumpleaños número 94 de su longevo padre, de quien decía: “Eres y siempre serás mi brújula en la vida”

Actualmente se encuentra en Barcelona, que es donde Álex está siendo tratado por su enfermedad. Allí se encuentra el doctor Baselga, que sigue el caso desde el inicio del tratamiento en Estados Unidos.