logo
página principalNoticiasPersonas
twitter.com/ghoficial
twitter.com/ghoficial

'Te quiero infinito': el cálido mensaje de Makoke a su difunta madre en el Día de la Madre

Mayra Pérez
04 may 2020
20:16

El pasado sábado falleció la madre de la colaboradora de “Viva la vida” en Málaga, a los 88 años de edad, aparentemente de causas naturales. Makoke se encontraba en Madrid con sus hijos.

Publicidad

Con un dolor muy grande, Makoke ha dedicado unas sentidas y amorosas palabras a su madre, fallecida en una provincia alejada, por lo que no ha podido estar a su lado, darle un último abrazo, o acompañarla en sus últimos días.

Publicidad

“Hoy era tu día, no cabe más dolor y amor (...) todo lo que nos has dado, ese amor incondicional a tus 6 hijas y a tu marido, te hicieron tan especial, que nos has dejado un vacío imposible de recuperar, pero siempre estarás ocupando gran parte de mi corazón”, escribió Makoke a su madre.

“La familia que creaste seguiremos tal y como nos dejaste, con tu legado basado en el amor. Tendré siempre en mi memoria tu sonrisa, y esa alegría que desprendías, que hacía sentirnos tan bien teniéndote como matriarca. Te quiero infinito, siempre, mamá, espero que me des aliento y fuerza para superar tu ausencia”, finalizó el emotivo mensaje que Makoke escribió a su madre a través de Instagram.

Publicidad

La publicación de Makoke la acompañó de una preciosa fotografía de Lourdes Teixeira Castillo dándole un amoroso abrazo a su hija menor, cuando contaba pocos años de vida.

A lo largo de estas duras semanas de confinamiento, la gran preocupación de Makoke era la distancia que la separaba de su madre, y la necesidad de ir a su lado a darle un buen abrazo y compartir tiempo a su lado.

Publicidad

El estado de alerta las tomó en ciudades diferentes, ya que Makoke se encontraba en Madrid, al lado de sus hijos Javier Tudela y Anita Matamoros, mientras su anciana madre estaba en Málaga.

Anita también se ha despedido de su abuela con la publicación de una fotografía en blanco y negro de doña Leonor en plena juventud, luciendo un rostro perfectamente armónico y hermoso, y la acompañó de un corazón roto, como símbolo de su gran tristeza.

Publicidad
Publicidad
Publicaciones similares