Dani Rovira utiliza su humor para enfrentar la última parte de su tratamiento contra el cáncer
Con su particular visión de cómo afrontar el día a día al lado del cáncer, el actor comparte imágenes de una de sus sesiones de radioterapia, en su camino a erradicar la enfermedad de su organismo.
Cuando Dani Rovira supo que su cansancio y malestar tenían nombre y apellido, linfoma de Hodgkin, lo asumió sin temor y con una confianza plena en que lograría superarlo. Con mucho humor ha ido compartiendo su experiencia a través de las redes sociales.
En esta oportunidad lo hizo con un video dividido en cuatro sectores que va mostrando pantallas en las que se aprecian los equipos de radioterapia y la información que muestran a lo largo de la sesión.
“Ea, pues ya he tenido mi ratito distópico de cada mañana”, escribió Dani, con la acostumbrada etiqueta ‘siempre fuerte’.
Los seguidores del actor y humorista se mostraron como siempre muy solidarios con él, con más de 300 mil 'me gusta' luego de apenas horas de la publicación, y casi 4 mil comentarios, donde le hacen simpáticas bromas, además animarlo a seguir adelante y felicitarlo por su actitud y por la positividad que transmite a otros.
“Esos rayos te convertirán en un súper héroe”, “¡Animooo! Tú eres un ejemplo a seguir y siempre con tu sonrisa”, “El mundo necesita gente como tú”, “¡Fuerte como un roble! ¡Oleeeee! Qué ejemplo nos estás dando”, fueron unos pocos mensajes que resaltan en la publicación de Rovira.
Hace un par de semanas, el artista anunciaba el fin de la quimioterapia con gran emoción, explicando las secuelas con las que estaba lidiando, como la pérdida del cabello y el endurecimiento de las venas de sus brazos. También daba la buena noticia de que los linfomas habían desaparecido.
Sin embargo, el camino por recorrer no terminaba ahí, y aún debía pasar por 18 sesiones de radioterapia, una por día. Este episodio de su vida llegará a su fin a mediados de agosto, y una de esas sesiones fue la que compartió con todos sus seguidores.
A pesar de seguir en pleno tratamiento, Dani ha querido de a poco ir retomando sus antiguas rutinas de vida, y así algunos días atrás se volvió a calzar sus zapatos deportivos y corrió a su nuevo ritmo por 44 minutos, lo cual fue sin duda un gran logro.