Paz Padilla retoma la alegría de vivir tras la muerte de su marido con ayuda de su pequeña sobrina

La actriz española consigue en su familia el apoyo y cariño que necesita para salir adelante después de un año en el que sufrió duras pérdidas que incluyen la muerte de su madre y seis meses más tarde la del amor de su vida.

El amor y ternura desbordan desde la mirada que la presentadora y actriz Paz Padilla da a su sobrina mientras juega con ella, en momentos que le reconfortan en medio del gran duelo que está viviendo su corazón.

Con una linda imagen de su pequeña sobrina recogiendo frutos del huerto aprovecha la oportunidad para darle un consejo de vida. “Con el amor que tú le pongas a todo así será los frutos”, escribió en su cuenta de Instagram.

Sus seguidores reaccionaron por lo hermoso que ha quedado el huerto a la actriz, pero también manifestaron lo mucho que le han extrañado en las últimas semanas.

En un video también cargado de ternura se escucha a Paz reír divertida mientras su sobrina Valentina regaña a la mascota de la casa, una linda canina llamada Martina, por intentar llevarse el coche de su muñeca. “Me da la vida”, comentó junto al audiovisual.

Los fanáticos de Padilla saben que oírla reír es saber que tiene un respiro que le ayuda a avanzar en circunstancias tan difíciles por la muerte de Antonio Juan Vidal, el amor de su vida, en julio pasado y de su suegra Ana Isabel Agarrado hace unos días. Todo a solo meses de que falleciera su madre, Dolores Díaz, en febrero a los 91 años.

Así mismo lo han sentido sus amigos como Carlota Corredera, quien le escribió lo feliz que la hacía escucharla reír. Además destacaron la dicha que los niños tienen para alegrarnos la vida.

Anteriormente, en otra publicación hecha en sus redes sociales, fue sincera con respecto a sus sentimientos y lo duro que está siendo este transitar para ella.

“Ahora estoy de retiro, atravesando el desierto más duro de mi vida, donde solo veo piedras en el camino. Él me ayudará a encontrar mi destino. Soy un animal herido, pero avanzando”, citó El Español.

Así lo manifestó en la que había sido su última publicación el pasado 26 de julio. Los instantes con su sobrina que ha decidido compartir representan su regreso a la actividad en Instagram, pero también el retorno de su risa.

Padilla continúa en su hogar en Zahara de los Atunes, Cádiz, donde ha estado arropada por el cariño incondicional de su hija Anna Ferrer e Iván, el novio de la joven, quienes no han dudado un segundo en apoyar a la actriz.

La casa que se ha convertido en el refugio de Paz tiene una maravillosa vista al mar y una decoración minimalista con muchos detalles en madera y color blanco que sin duda evocan una sensación de tranquilidad.

Los rincones de este hogar han sido visto por el público a través de los ojos de Anna, quien ha compartido en redes sociales algunas fotografías de su estadía en este lugar que ha sido por muchos años el destino preferido de la familia.

Aunque Padilla está residenciada en Madrid desde hace muchos años, volver a Zahara de los Atunes le genera profunda tranquilidad como lo demuestra en redes sociales. Allí conecta con el mar y también con la familia.