Miguel Bosé: su problemática relación con los medios, el extremo secretismo y la naturaleza impredecible del cantante
Desde pequeño el artista español ha estado rodeado de las cámaras. En el presente, aunque es un personaje público, mantiene distancia con la prensa.
Miguel Bosé tiene una problemática relación con los medios. Además, es una persona con muchos secretos que demuestra tener una naturaleza impredecible.
A pesar de ser famoso, nunca se ha sentido cómodo con eso. Que le sigan los pasos y estar expuesto a los reporteros parece ser algo que le da alergia.
Miguel Bose e hijos asisten al estreno de Warner Bros. Pictures y "Godzilla: King of the Monsters" de Legendary Pictures en el Teatro Chino TCL el 18 de mayo de 2019 en Hollywood, California. | Foto: Getty Images
RUPTURA TOTAL
Su relación con los medios está rota totalmente. De hecho, recientemente provocó un fuerte debate al autoproclamarse negacionista. El cantante convocó a manifestar a la calle en contra de las medidas por el COVID-19 y muchos se lanzaron en su contra.
Pero resulta que su mala relación con la prensa la ha venido arrastrando por años. Miguel no les perdona que hayan publicado mentiras sobre su salud e incluso dijeran en 1992 que se debatía entre la vida y la muerte en un hospital de Madrid.
Lo cierto es que muchos fueron los intentos del cantante por frenar los ataques de la prensa. El objetivo de los medios era destapar su orientación sexual al asegurar que el artista padecía una enfermedad venérea.
Pero a pesar de todo lo que han hecho para escudriñar en la vida privada del español, Bosé nunca ha dado señales de querer abrirle su corazón a la prensa rosa. Por el contrario, es celoso de su intimidad y no hace mención de sus asuntos sentimentales.
Quizá su actitud huraña viene de haber crecido con el desapego de una familia controvertida que aisló al intérprete de “Amante bandido” hacia la soledad.
Miguel Bosé en la playa de Cap Ferret. | Foto: Getty Images
EN SECRETO
Miguel Bosé siempre ha querido mantener su vida privada en secreto. Quizá por su orientación sexual pudo haberle costado su carrera en tiempos pasados cuando la sociedad condenaba a los homosexuales.
Lo cierto es que el cantante se ha mantenido muy discreto por muchos años y nada sobre sus asuntos amorosos ha salido de su boca.
Tan radical ha sido con sus cosas personales, que su relación sentimental con Nacho Palau, con quien sostuvo un romance por muchos años, nunca se hizo pública. Muchos creían era un empleado del artista y no su pareja y padre de sus hijos por gestación subrogada.
Nunca en una entrevista, Miguel ha sido afectuoso con la prensa. De hecho, sus actuaciones frente a los medios han sido impredecibles.
Aunque su talento lo ha llevado a ser catalogado como un fenómeno dentro del mundo del espectáculo, por el éxito obtenido desde los años setenta, hasta la fecha no ha sentido interés en compartir su existencia con los reporteros.
Sin embargo, ser el hijo de Luis Miguel Dominguín y Lucía Bosé, es como tener un imán en el bolsillo que atrae a los paparazzi.
Lo cierto es que Miguel ha escondido todo lo que ha podido de su entorno para que nadie pueda revelar lo que sucede a su alrededor, sobre todo si se trata de lo que ocurre en los temas del amor.
Si el trabajo de un periodista es entrevistar a Bosé, es probable que sea una dura labor. Se trata de un personaje seco y distante que se divorció de los medios mucho antes de ser un cantante reconocido en todo el mundo.
Miguel Bosé en la playa Cap Ferret. | Foto: Getty Images.
Lo cierto es que durante décadas Miguel ha tenido una doble vida. En el ámbito profesional brinda lo mejor de sí a sus seguidores, pero en el personal es áspero con los medios. Esconde siempre lo más que puede su vida.
Él prefiere la clandestinidad antes que el escarnio público. Quizá eso ha generado ansiedad entre los que manejan la prensa y por eso desean escudriñar en la vida de hijo del famoso torero español y la actriz italiana.