Jefe generoso convierte a 74 de sus empleados en millonarios, incluidos conductores y secretarias
El fundador de una exitosa empresa de tecnología en el Reino Unido ha repartido más de 1.3 billones de dólares a sus empleados a través de los últimos 10 años. Y tiene planes de regalar aún más.
Matthew Moulding, fundador de la empresa de mercadeo y tecnología The Hut Group, es un jefe especialmente generoso. En la última década, ha regalado acciones en su empresa a más de 430 empleados, con un valor total de más de 1,3 billones de dólares.
El dinero ha ido a empleados de todo nivel, desde gerentes hasta secretarias y trabajadores de almacén.
Boris Johnson y Matthew Moulding en Warrington, Inglaterra en diciembre de 2019. | Foto: Getty Images
La empresa hoy en día puede jactarse de haber creado más millonarios que cualquier otra compañía en la historia de Gran Bretaña. Las acciones son un regalo, y no tienen costo alguno.
El dinero ha ido fluyendo hacia trabajadores en todos los niveles, desde secretarias y almacenistas hasta conductores y personal técnico. Estos regalos habrían permitido a 74 empleados convertirse en millonarios, según afirma Moulding. Y el empresario tiene planeado repartir otros 230 millones de dólares en acciones.
Algunos de los empleados que recibirán esos 230 millones son personas con grandes deudas por sus estudios universitarios, o que jamás completaron sus estudios. Las acciones probablemente cambiarán sus vidas para siempre.
Moulding ha gozado de mucha suerte en los negocios. Su empresa se ha convertido en una de las más grandes del sector tecnológico en el país. Su fortuna personal se estima en más de dos billones de dólares. Sin embargo, Moulding insiste en que el dinero no es su prioridad: sigue su pasión.
Para Moulding, el enfoque en su fortuna personal es innecesario, pues el verdadero aporte de su empresa debe medirse por la riqueza que ha repartido a sus empleados. Las sumas han sido considerables.
Por ejemplo, un chofer con menos de dos años de experiencia en la compañía recibió $52.000 dólares, que usó para comprar un auto y tomarse unas vacaciones familiares de ensueño. Aún le quedan otros $80.000 en acciones, que planea usar para la educación de sus hijos.
Un gerente de la empresa vendió más de $130.000 en acciones, y usó las ganancias para pagar por su boda y pagar la inicial de su hogar de ensueño. El gerente, de apenas 30 años de edad, comenzó en la empresa como aprendiz.
Aún le quedan unos $800.000 en acciones. Según el empleado, es una oportunidad increíble, pues viene de orígenes humildes, y el dinero le permitirá a sus hijos tener un mejor futuro.
La generosidad es algo realmente inspirador. Recientemente, un donante anónimo regaló más de un millón de dólares a un hospital para mostrar su agradecimiento al personal médico por todo lo que han hecho durante la pandemia.