Conoce a Mansur, el oso pardo que vive en Rusia y tiene "un padre humano"
Los animales salvajes suelen representar un grave peligro para los seres humanos. Sin embargo, algunos de ellos sorprenden por la increíble relación que tienen.
En 2016, un grupo de aviadores encontraron a Mansur, un oso pardo, que estaba abandonado en un aeródromo en la provincia de Tver, en Rusia.
El pequeño tenía unos pocos días de nacido y de inmediato se convirtió el consentido de los hombres que lo hallaron. Cinco años más tarde, es toda una estrella en las redes sociales.
Mansur está al cuidado de Andréi Ivanov, uno de los pilotos que lo rescató, quien le ha creado perfiles en Tik Tok, YouTube e Instagram. En esta última acumula más de 100.000 seguidores.
Sus fanáticos no dejan de ver sus aventuras en la nieve y la estrecha relación que tiene con su cuidador, quien escribe divertidos mensajes sobre su tiempo con el oso pardo.
Los seguidores del Mansur aprovechan las publicaciones para elogiar la labor de Ivanov y comentar lo mucho que les gusta todo lo que hace junto a su mascota.
El oso es el gran amor del aviador, a juzgar por la fotografía que publicó junto él para el Día de San Valentín. En la imagen se puede ver al cuidador encima de su amigo peludo mientras él le da una lamida en el pecho con su enorme lengua.
La publicación tuvo más de 11.000 "me gusta" e hizo enloquecer de ternura a los seguidores de Mansur, quienes no dudaron en llenar la sección de comentarios.
"Que foto tan cool", "Ah tu querido Valentín peludo. Te entregó su corazón", "Te felicito por todo el amor que le das a Mansur", dijeron algunas personas.
Una historia similar tienen los dueños y personal de un bar en Australia con un grupo de canguros que visitan el local todos los días en horario laboral.
El líder de la manada se pasea por la taberna como todo un experto desde hace 20 años, mientras se codea sin ningún problema con los clientes.
En la noche se va con sus amigos y al día siguiente vuelve puntual a su jornada de trabajo. Mira aquí más detalles de las travesuras de Mankey, como lo llaman los empleados del lugar.