El maltrato psicológico en las relaciones: cómo detectarlo

Reconocer el maltrato y abuso físico es relativamente sencillo. Sin embargo, las señales que indican la existencia de abuso psicológico suelen ser más sutiles. Aprende a reconocerlas.

El maltrato es una realidad que millones de personas en el mundo viven todos los días. Poco a poco, la sociedad ha comenzado a despertar, señalando estas conductas como lo que son: abuso.

Sin embargo, el maltrato psicológico sigue siendo difícil de identificar para muchos. El abuso emocional puede ser sutil, por lo que es crucial poder conocer las señales.

ABUSO INSIDIOSO

Hay muchos factores que complican el proceso de detección de un maltrato psicológico. La mayoría de nosotros no comienza una relación buscando señales de posible abuso y maltrato.

Como consecuencia, cuando vemos cosas que nos llaman la atención negativamente, solemos inventar razones y excusas para justificar la conducta. Silenciamos esa voz interior que nos dice que algo anda mal.

Sin embargo, a pesar de que el abuso psicológico no deja huellas físicas, es posible percibirlo a través de palabras, acciones y conductas. A continuación, te presentamos una lista de posibles señales de maltrato emocional.

SEÑALES DE MALTRATO

1. Tus emociones son minimizadas o invalidadas. Cada vez que algo te molesta, te entristece o te indigna, te tildan de loco, dramático o inmaduro.

2. Te aísla de tus amigos o parientes. Cada vez que quieres salir a verlos, se enoja porque "descuidas" la relación.

3. Vigila tu teléfono. Sabe tu código de desbloqueo y sabes que lo usa, porque te hace preguntas que solo podría hacer si revisa tu móvil.

4. Se obsesiona con tus redes sociales. Estudia todos los comentarios y reacciones, y te echa la culpa si algo le molesta.

5. Usa manipulación emocional para tener sexo. Cuando sus actitudes reducen tu deseo sexual, te acusa de no amarlo, o dejar perder la relación.

6. Todo lo tuyo no es importante. Cuando te pasa algo bueno, hace caso omiso, o le busca defectos. Cuando te pasa algo malo, reduce su importancia o lo ignora del todo.

7. Control total de tu vida social. Cuando sales con amigos, si es que llegas a hacerlo, te hace reportar cada detalle: sitio, hora, acompañantes, cuándo vuelves y demás. Si no lo haces, te dice que es tu culpa que se ponga tan celoso.

8. Critica la forma en la que usas tu propio dinero. No importa si tienes tu propio sueldo, y no importa si lo usas para comprar ropa, maquillaje, libros, o cualquier cosa. Todo lo que a ti te gusta es un lujo innecesario.

9. Nunca admite que obró mal. Está dispuesto a negar hechos, fotos, evidencia, y cualquier cosa que lo deje mal parado. Te acusa de inventarte cosas o malinterpretarlo todo.

10. Aplica siempre la ley del hielo. Cuando pelean, o incluso cuando simplemente tienes una opinión distinta a la suya y no cedes, te quita el habla del todo. No vuelve a dirigirte la palabra hasta que te disculpas.

11. Cuando se le sale una palabrota o insulto en una discusión, se disculpa echándote la culpa. Es decir, admite que hizo algo malo, pero únicamente porque tú lo provocaste.

12. De paso, los insultos en sí son una señal de alerta. Suelen comenzar con palabras no tan pesadas, como "tonta" o "inmadura", pero con el tiempo evolucionan a insultos soeces y ofensivos.

13. Frecuentes amenazas de abandonarte, dejar la relación, contar tus secretos a tus amigos, filtrar fotos comprometedoras, o hasta agredirte físicamente. Incluso si nunca hace estas cosas, la mera amenaza es abuso.

14. Nunca quieres contar nada de tu relación a nadie, porque te da miedo que tu pareja sepa que estás hablando con otro. O, peor aún, no cuentas nada por temor a que piensen que es maltrato.

15. Te deja en ridículo ante los demás con frecuencia. Cuando ofreces tu opinión sobre un tema en discusiones grupales, fiestas o salidas con amigos, refuta todo lo que dices y no te deja hablar.

16. Siempre decide por los dos, y usualmente sin consultarte. Desde planificar vacaciones hasta grandes gastos, todo lo hace por los dos y sin preguntarte nada antes. Si lo cuestionas, se enfada.

17. Si te mira un hombre o intenta coquetear contigo, inmediatamente te sientes culpable, como si hubieras pedido que eso pasara. Evitas contarle estas cosas para que no se enoje.

18. Cuando enfrenta problemas en su vida personal o profesional, tú terminas llevándote la culpa de una forma u otra. Usa lógica rebuscada para hacerte responsable de todos sus fracasos.

19. Todo lo juzga negativamente. Si no te arreglas, estás descuidando la relación. Si te arreglas, estás buscando enamorar a alguien más. No importa lo que hagas, está mal.

20. Con el tiempo, llegas a creer que tu vida no tiene sentido sin tu pareja. La idea de una vida sin tu pareja te aterra, pues temes que no volverías a encontrar a alguien que te tolere.

Salir de una relación tóxica y abusiva es uno de los mejores pasos que puedes dar si quieres más paz mental en tu vida. Sin embargo, no es el único.

De hecho, hay muchas formas de cuidar de tu salud mental. Y, tras más de un año de pandemia, todos necesitamos un poco de cuidado extra.