La hija de Marlon Brando se quitó la vida en 1995 tras experimentar una tragedia personal

El actor tuvo una carrera tremendamente exitosa que abarcó décadas. Pero su vida personal estuvo repleta de tragedias que ensombrecieron sus años dorados.

Marlon Brando definitivamente es parte del panteón de figuras icónicas de Hollywood. Fue ampliamente considerado el mejor actor de su generación por legiones de seguidores.

Era conocido por su masculinidad y su fuerte carácter, que exhibió en muchos papeles a través de su carrera. Si bien era un actor increíble, su vida estuvo llena de miseria y dolor.

La vida de Brando terminaría siendo marcada por la tragedia, y sufrió un descenso aparentemente inevitable. Era una extraña paradoja para un hombre que pasó su carrera rodeado de elogios y afecto.

Brando nació en Nebraska en 1924. Su padre, Marlon Brando Sr., era un fabricante de químicos y pesticidas. Su madre, Dorothy, fue actriz. Ambos eran alcohólicos, e hicieron de su infancia un infierno.

Su padre era muy abusivo, y solía tener arranques violentos dirigidos hacia él y hacia su madre. Además, Brando Sr. constantemente criticaba a su hijo, provocando un complejo de inferioridad que lo torturaría el resto de su vida.

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Años después, Brando reconoció que sus problemas en Hollywood con la autoridad y la popularidad se originaron en esta época de su infancia. Y lo mismo con sus excesivos amoríos y romances.

Tenía además problemas con el abandono, pues siempre sintió que su madre prefería la bebida a cuidar de él. Como resultado, solía arruinar sus relaciones para no tener que ser abandonado.

En su infancia ya mostraba su talento histriónico, pues era un prodigioso imitador. Pero tenía muchos problemas de conducta, y llegó a ser echado de una academia militar. Tuvo que cavar zanjas para ganarse la vida.

Posteriormente, Brando se mudó a Nueva York para trabajar con Stella Adler en el famoso estudio de Lee Strasberg. Adler habría sido la musa de Brando en sus primeros años. Ella le presentó los clásicos de literatura, música y teatro.

Adler enseñaba usando la técnica de actuación de Stanislavski, en la cual los actores se apoyan en sus propias experiencias para generar emoción. Brando aprendió rápido, y al poco tiempo consiguió papeles que lo hicieron una estrella.

Su primera obra de Broadway fue el clásico de 1944, 'I Remember Mama', de John Van Druten. Posteriormente, críticos de teatro de Nueva York le dieron el premio al Actor Más Prometedor por su actuación en 'Truckline Cafe'.

En 'Un Tranvía Llamado Deseo', de Tennessee Williams, Brando interpretó a Stanley Kowalski, el abusivo esposo que agrede sexualmente a su cuñada, Blanche DuBois. Fue su papel más exitoso en Broadway.

La década de los 50 fue excelente para Brando, pero los 60 trajeron nuevas dificultades para el actor. Le costaba lidiar con su fama, y solía pelear con sus coestrellas.

En cierto punto, decidió encarar a la industria entera. Esa actitud le hizo sumamente difícil seguir trabajando, y su carrera fue poco a poco perdiendo impulso.

"El Padrino" fue la película que salvó la carrera de Brando. Su papel como el inescrupuloso, pero protector patriarca de la mafia de Nueva York, Don Corleone, cimentó su condición como ícono de Hollywood.

La película llegó a ser conocida como una de las mejores cintas de todos los tiempos. Además, permitió a Brando llevarse a casa su segundo premio Óscar al Mejor Actor.

Brando siguió estando involucrado en escándalos y pleitos en los años que siguieron a la película. Sin embargo, ningún episodio fue tan brutal como la tragedia que ocurrió con sus hijos.

De todos los hijos biológicos y adoptivos que tuvo Marlon, Christian Brando es probablemente el más prominente. Al igual que su padre, Marlon podía ser muy agresivo, y solía dirigir estas emociones hacia su hijo Christian.

El joven Christian creció en un ambiente muy inestable, y comenzó a presentar problemas de conducta. A menudo se enfrentaba a la policía por diversos motivos.

El mayor escándalo ocurrió en mayo de 1990. Para la fecha, Cheyenne Brando, media hermana de Christian, estaba esperando su primer bebé junto a Dag Drollet, su prometido. Tenía ocho meses de embarazo.

Tristemente, Drollet fue asesinado. Christian fue sentenciado a prisión por 10 años por la muerte de Drollet, luego de que el jurado lo hallara culpable de homicidio culposo.

Según Christian, Drollet estaba torturando físicamente a Cheyenne. Christian dijo que luchó mano a mano con Drollet, y que accidentalmente le disparó.

Marlon, quien estaba en casa en el momento, le dio respiración boca a boca a Drollet y llamó a los servicios de emergencia, pero era demasiado tarde. El incidente destrozó a Brando y a su hija. Cheyenne perdió las ganas de vivir.

A partir de ese punto, la joven comenzó a mostrar conductas suicidas. Se sentía profundamente miserable. "Quiero morir, porque no es posible que él ya no esté aquí", habría dicho Cheyenne. "Nunca encontraré a otro como él".

Para Brando, fue una de las experiencias más traumáticas de su vida. El actor pasó años intentando proteger a sus hijos de los peligros de la fama.

No era la primera vez que sus hijos estaban en peligro. Su hijo Christian llegó a ser secuestrado por una banda criminal que exigió 10.000 dólares de rescate. Pero ver a su hijo acusado de homicidio fue aún más doloroso.

Christian moriría años después, a la corta edad de 49 años, debido a problemas de salud. Pero de los hijos de Brando, ninguno tiene una historia tan trágica como Cheyenne.

Era una joven con problemas de drogas y salud mental, siempre entrando y saliendo de centros de rehabilitación. Creció odiando a su famoso padre por haberla rechazado.

Su lucha con la depresión solo empeoró luego de la muerte de Drollet. Eventualmente, un juez le quitó la custodia de su hijo para dársela a la abuela, pues Cheyenne no estaba en condiciones de criarlo.

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Cheyenne habría intentado el suicidio en varias oportunidades, sin éxito. Finalmente, en 1995, su cuerpo fue hallado sin vida en su hogar.

Brando siempre se sintió responsable por la muerte de su joven hija. Notablemente, en el funeral de Cheyenne, la prensa se percató de que el famoso actor había optado por no asistir.

En México el Sistema Nacional de Apoyo, Consejo Psicológico e Intervención en Crisis por Teléfono ofrece atención a través del 0155 5259-8121. En Estados Unidos, puede llamar a la Red Nacional de Prevención del Suicidio al 1-888-628-9454. En España, llame al Teléfono contra el Suicidio a través del 911 385 385. Otras líneas internacionales de ayuda al suicida pueden encontrarse en befrienders.org.