Mi hermana quiere llevarse a mi hijo debido a mi situación de vida - Historia del día
Mi hermana quiere llevarse a mi hijo porque yo no tengo un hogar que darle en estos momentos, pero ella no pensó a enfrentar dificultades.
Soy Gloria, una mujer de 30 años, madre de un hijo de ocho. En este momento, no tenemos hogar. Al principio de la pandemia, me despidieron de mi trabajo y perdí mi única fuente de ingresos. Poco después, perdí mi casa.
Ya logré conseguir otro trabajo, pero todavía no hemos conseguido un hogar. Por ahora, dormimos en hoteles y moteles, y eso se refleja en mi cuenta bancaria. Puedo costear un departamento, pero no los dos meses de depósito.
Madre e hijo sin hogar. | Foto: Shutterstock
Me resulta imposible pagar dos meses por adelantado, porque el alquiler ya es la mitad de mi sueldo. No logro ahorrar dos meses de alquiler mientras tengo que pagar hoteles cada noche, así que la situación es complicada.
Mi hermana actualmente goza de estabilidad económica, y varias veces me ha ofrecido recibir a mi hijo. Dice que puede darle una habitación para que viva con ella tranquilo, pero cada vez que lo propone, yo rechazó la oferta.
Mi hijo no quiere mudarse con su tía. De todas formas, en la habitación de hotel que compartimos él tiene algo de privacidad. Hay una cortina que separa nuestras camas.
Hace poco, mis padres se enteraron de que mi hermana ha estado ofreciendo recibir a mi hijo en su casa. Ambos están furiosos de que yo haya rechazado la oferta.
De hecho, llegaron a llamar a Servicios Infantiles para denunciarme como mala madre. Sin embargo, cuando la trabajadora social inspeccionó nuestro caso, nos dejan tranquilos, porque no es ilegal ser madre y no tener casa.
Además, me aseguro de darle a mi hijo todo lo que pueda necesitar. Bueno, todo excepto un patio trasero en el cual jugar. Pero eso no le importa a Servicios Infantiles.
Madre e hijo viendo por la ventana de un hotel. | Foto: Shutterstock
Sin embargo, mis padres seguían molestos, e insistían en que yo debería aceptar la oferta de mi hermana de alojar a mi hijo en su casa. Mi hermana incluso se había ofrecido a cubrir todos sus gastos de manutención.
Su preocupación por mi hijo es bienvenida, pero en ese momento estaba comenzando a dolerme. Si mi hermana se preocupaba tanto por nuestro bienestar, podía perfectamente invitarnos a los dos a su casa.
Que no lo haya ofrecido me parece desconcertante, y me hace preguntarme cuál es su verdadero interés. Tras otra visita de Servicios Infantiles para niños, me rendí. Decidí que me vengaría de mi hermana enviando a mi hijo a su casa.
"Te vas a quedar con tu tía a partir de ahora", le dije una tarde. Me sentí muy triste por dentro al decirlo, y la expresión de traición en su rostro casi me hizo retirar lo dicho.
"No quiero, mamá. Estoy bien aquí", respondió mi hijo. "Perfecto. Saldrá mal porque no quiere ir", pensé. Esa noche lo dejé en casa de mi hermana. Dos días después, ella me llamó.
Parece ser que mi hijo rayó todas las paredes de su casa con marcadores permanentes. Y ella sí que ama esas paredes. Cada cuarto está pintado en tonos diferentes de su color favorito.
Niño junto a pared rayada. | Foto: Shutterstock
Le dije que buscara alguna forma de limpiar las paredes, y le dejé bien claro que no podía gritarle ni insultarlo cuando lo regañara. A los cuatro días, me volvió a llamar para decirme que había destrozado su jarrón de flores favorito.
Una semana después de eso, me llamó para decirme que mi pequeño angelito, que viviendo conmigo nunca rompe ninguna regla, casi había incendiado la casa intentando prepararse el desayuno.
Traté de calmarla, pero era imposible. Estaba hasta la coronilla, así que me pidió que fuera a buscar a mi hijo. Mi plan había surtido efecto, y más rápido de lo que había anticipado.
Fui a buscar a mi hijo, que estaba más que feliz de verme, y lo llevé de regreso a nuestro hotel. Desde entonces, mi hermana y los demás miembros de mi familia no han vuelto a mencionar llevarse a mi hijo.
Madre abrazando a hijo. | Foto: Shutterstock
¿Qué podemos aprender de esta historia?
Cuando las personas rechazan tu ayuda, acepta que tienen el derecho a hacerlo. Gloria estaba sola, pero no necesitaba la ayuda de su hermana.
No seas manipulador. La hermana de Gloria estaba usando a sus padres y a los Servicios Infantiles para manipular a Gloria y quedarse con la custodia de su hijo. Y por eso terminó con las paredes rayadas.
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Este relato está inspirado en la historia de un lector y ha sido escrito por un redactor profesional. Cualquier parecido con nombres o ubicaciones reales es pura coincidencia. Todas las imágenes mostradas son exclusivamente de carácter ilustrativo. Comparte tu historia con nosotros, podría cambiar la vida de alguien. Si deseas compartir tu historia, envíala a info@amomama.com.