Novio temía rechazo y esperó hasta después de la boda para decirle a su novia que no tenía piernas

Un hombre perdió sus piernas en la infancia tras una explosión. Los doctores tuvieron que amputarlas y le dieron prótesis para caminar. Tuvo una dura vida como huérfano, pero todo mejoró cuando halló al amor de su vida.

En Ruanda, un hombre sintió una fuerte amargura luego de sobrevivir a un trágico accidente que le costó ambas piernas. Por largo tiempo, la vida le presentó constantes desafíos.

Había perdido toda esperanza cuando un milagroso encuentro cambió su vida para siempre.

Ndayisenga Jean De Dieu escapó a la República Democrática del Congo luego de que una guerra estallara en su país natal. Al volver a casa, él y su familia se vieron involucrados en la explosión de una bomba.

Como consecuencia, Ndayisenga quedó gravemente herido y fue llevado al hospital, donde pasó dos meses en coma. Al despertar, descubrió que los doctores le habían amputado una pierna.

Posteriormente, la otra pierna fue amputada para proteger su vida de una infección. Ndayisenga tenía apenas siete años en aquel entonces, y terminó odiando a los doctores por lo que le hicieron.

Poco después, el chico perdió a tres familiares en un período de menos de tres años. Primero murió su hermanito. Además, su madre falleció en el parto de un bebé que nació sin vida.

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Su padre tuvo que empezar a hacerse cargo de él y de su hermana. Sin embargo, el destino no había terminado de jugarle malas pasadas al chico.

Una enfermedad se llevó a su padre poco tiempo después. Luego de su muerte, Ndayisenga y su hermana quedaron huérfanos, y la vida era muy dura.

Debido a su discapacidad física, sus parientes lo abandonaron, y nadie quería ayudarlo. El constante bullying y los maltratos terminaron llevando a Ndayisenga a pensar en el suicidio.

Un día, un grupo de monjas lo halló en terribles condiciones y lo llevaron a recibir terapia física. Le dieron un par de prótesis para que pudiera caminar, pero les tomó un tiempo acostumbrarse.

En sus sesiones de terapia, conoció a otras personas con condiciones similares. Tras hablar con ello, su perspectiva comenzó a cambiar y su estado de desesperanza comenzó a disminuir gradualmente. Ndayisenga ahora quería vivir una vida normal, como cualquier otro ser humano.

Tras terminar la secundaria, descubrió que su talento oculto era el canto. Su primera canción fue dedicada a las personas discapacitadas. En 2018, Ndayisenga conoció al amor de su vida en una competencia de swing.

"Nos conocimos cuando yo estaba en una competencia. Desde el escenario, me felicitaron. Hablamos, pero podía ver que ella estaba curiosa, con muchas preguntas que hacerme", explicó.

Al poco tiempo, Ndayisenga y Debora Muteteri se convirtieron en grandes amigos. Eventualmente, se convirtieron en pareja, pero acordaron no tener intimidad física hasta después de casados.

Por eso, Debora nunca tuvo la oportunidad de ver sus piernas. Ella sabía que Ndayisenga cojeaba al caminar, pero pensaba que era debido a alguna herida temporal.

Además, Ndayisenga temía que de decirle la verdad a Debora, ella lo dejaría. Esa idea lo aterraba. La gente le decía que debía mantenerse soltero o buscarse una pareja también discapacitada.

Eventualmente, contrajeron matrimonio en una fastuosa ceremonia. E incluso en la ceremonia, Debora no notó las prótesis de su nuevo marido. No fue sino hasta llegar a casa de la boda que se enteró de la verdad.

Ndayisenga se armó de valor para decirle la verdad a Debora, comenzando por la historia de cómo perdió sus piernas, y todas las dificultades que ha enfrentado. Pero en vez de burlarse de él o dejarlo, Debora lo sorprendió con su reacción.

En entrevista con Afrimax, la pareja reveló que la gente intentó convencerlos de que debían terminar la relación. A Debora le aconsejaron el divorcio, mientras que a Ndayisenga le dijeron que su esposa lo dejaría en menos de una semana.

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Muchas mujeres habrían dejado a sus maridos tras descubrir semejante secreto. Pero Debora escogió quedarse junto a Ndayisenga. De hecho, tras enterarse de su condición, dijo que se enamoró de él aún más.

Ahora, Afrimax creó una página de GoFundMe para recoger fondos en nombre de Ndayisenga, buscando reemplazar sus prótesis por unas nuevas. Su increíble historia es prueba de que el verdadero amor siempre persevera. ¡Enhorabuena!

En México el Sistema Nacional de Apoyo, Consejo Psicológico e Intervención en Crisis por Teléfono ofrece atención a través del 0155 5259-8121. En Estados Unidos, puede llamar a la Red Nacional de Prevención del Suicidio al 1-888-628-9454. En España, llame al Teléfono contra el Suicidio a través del 911 385 385. Otras líneas internacionales de ayuda al suicida pueden encontrarse en befrienders.org.