Abuelo de 8 nietos hace reír a la familia en su propio funeral con una broma "desde la tumba"
Un hombre oriundo de Dublín, Irlanda le jugó una hilarante broma a todos los presentes en su funeral. Su jugarreta tuvo el efecto deseado: transformó sus lágrimas en risas.
Shay Bradley y su esposa Anne pasaron juntos una vida entera. Fueron amigos de infancia, y luego estuvieron casados por 43 años. En ese tiempo, la prioridad de Shay siempre fue hacerla sonreír.
Era tal su afán por hacer reír a su esposa que se aseguró de poder hacerlo incluso después de muerto. Y el video de la genial broma con la que logró hacerla reír una vez más se hizo viral en las redes.
Invitados en el funeral de Shay Bradley. | Foto: Twitter.com/Andrea36496119 - Youtube.com/Liverpool ECHO
En el video, grabado en su funeral en octubre de 2019, su familia y amigos están reunidos en el cementerio. Todos están rodeando su ataúd a medida que desciende a su tumba.
En ese momento, se escucha la voz de un hombre desde el interior del ataúd, luchando por salir. Se trata por supuesto de una grabación de la voz de Shay, interrumpida por el sonido de insistentes golpes contra la tapa de madera.
"¿Hola? ¿Hola? ¿Hola? ¡Déjenme salir!", exclamó la grabación.
La voz de Shay además se quejó de lo oscuro que estaba el interior del ataúd. Tras gritar varias hilarantes frases, finalmente reconoció que estaba muerto.
El veterano de las Fuerzas de Defensa Irlandesas procedió a darle una serenata a los presentes. Cantó en un tono muy agudo, sacándole una carcajada a todos.
Lo mejor de todo es que logró su cometido: poner una sonrisa en el rostro de su viuda. Así lo explicó Andrea Bradley, la hija de Shay:
"Él quería asegurarse de que mi mamá estuviese riendo al salir del cementerio, no llorando. Y logró exactamente eso".
Andrea dijo que su papá ideó el plan aproximadamente un año antes del funeral. Hizo las hilarantes grabaciones en secreto mientras luchaba con una enfermedad que eventualmente le quitaría la vida.
El padre de cuatro le confió la grabación a su hijo Jonathan, y le pidió que la reprodujera en su funeral como una última broma. Dos días antes del entierro, Jonathan le contó a su madre y a sus hermanos sobre la grabación, y el último deseo de su papá.
Andrea aclaró que su padre siempre había sido un bromista, y que le hubiese encantado ver la risa que provocó a los invitados. Compartió el video por Whatsapp, y al poco tiempo se hizo viral en todas las redes sociales.
En YouTube, cientos de usuarios se desternillaron de la risa por la broma de Shay. "Debe haber sido un hombre muy gracioso en vida. Necesitamos más gente como él", escribió un usuario.
Luego de tres años de lucha, Shay falleció de cáncer, dejando atrás a cuatro hijos, ocho nietos y muchos sobrinos. Fue enterrado el 12 de octubre de 2019 en la iglesia de St. Kevin, en Kilnamanagh, Irlanda.