La princesa Diana "devolvía" algunos de los regalos que sus hijos recibían para Navidad porque "no los necesitaban"

La princesa Diana tenía algunas reglas de crianza para garantizar que el príncipe William y el príncipe Harry nunca fueran niños malcriados.

Las reglas de crianza de la princesa Diana mantuvieron a sus hijos centrados, incluso durante la Navidad. No es ningún secreto que a los miembros de la realeza les gustan las celebraciones navideñas.

Como hijos de la realeza, uno solo puede esperar que los príncipes hayan recibido muchos regalos y también costosos. Pero, aunque podían tener todo lo que quisieran, su madre tenía algunas restricciones. Más detalles abajo.

CRIANZA DE LOS PRÍNCIPES

Diana monitoreaba los regalos de sus hijos cuando los miembros de la realeza se preparaban para las festividades y disfrutaban de muchas tradiciones navideñas.

El príncipe Harry y su hermano, el duque de Cambridge, tenían un par de cosas que aprender de la crianza de su difunta madre. Antes de la trágica muerte de la princesa en 1997, ella dedicó suficiente tiempo para criar a sus hijos y fue una madre amorosa.

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Diana presuntamente fue la primera madre de la realeza británica en amamantar. También dio a luz a su primer hijo, William, en un hospital. Eso convirtió al príncipe en el primer heredero al trono nacido fuera de los muros del palacio.

El primogénito de la princesa de Gales también habría sido el primer heredero en asistir a la escuela pública. Patrick Jephson, jefe de gabinete de Diana, dijo una vez que ella trató de darle a su hijo una vida normal.

Durante una entrevista, Jephson dijo que la madre de los príncipes hizo que sus hijos experimentaran cosas como hacer cola para comprar comida en Mcdonald's.

También los llevó a lugares como el cine y creó muchos más recuerdos que podían compartir con sus amigos. También manifestó que ella hizo todo esto “muy inteligentemente”.

LAS REGLAS QUE LES IMPUSO

Las reglas de crianza de la princesa Diana instauraban algunos límites. El príncipe Harry y el duque de Cambridge tenían que cumplir con sus pautas.

A pesar de la tradición real que brindaba a sus hijos todo lo que podían desear durante las festividades, la princesa se aseguró de que nunca fueran malcriados o descorteses.

En una ocasión, Ken Wharfe, exguardaespaldas de la princesa Diana, dijo en una entrevista con OK que ella era “una madre muy práctica” y que su crianza no tenía fallas.

Explicó que la princesa se aseguraba de que sus hijos interactuaran con todo el personal, incluso mientras estaban en Sandringham.

Además, reveló que la madre alentaba a sus hijos a deambular por las áreas no reales. Ella y los príncipes daban un paseo hasta las habitaciones del personal. Uno de sus lugares favoritos para estar era la cocina, especialmente durante la Navidad.

La princesa Diana era una madre juguetona que permitía que sus niños fueran traviesos, como reveló una vez el príncipe Harry. Pero Wharfe dijo que también se aseguraba de que a los príncipes no les dieran demasiados regalos durante esas fechas.

“Diana se aseguraba de que no los inundaran con regalos: los obsequios aparecían de fuentes desconocidas y, a menudo, se devolvían o se entregaban a organizaciones benéficas porque no los necesitaban”, señaló Wharfe.

Diana era bastante cautelosa con lo que le decía a Harry y a William. A menudo regalaba a los príncipes artículos sencillos como libros o juegos que ella misma compraba. Sin embargo, agregó que Diana era generosa cuando se trataba de obsequiar.

IMPACTO DE DIANA EN SU HIJO

Todo el mundo sabe que a muchos niños les resulta difícil esperar hasta la mañana de Navidad para abrir sus regalos. Pero la difunta princesa de Gales reveló una vez que luchaba con la agitación para abrir sus regalos incluso cuando era adulta.

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Ella le heredó este aspecto a su hijo, el príncipe William. En una carta de 1985 a un amigo, Diana reveló que los paquetes nunca habían estado a salvo con ella.

También escribió sobre cómo tenía miedo de que su hijo mayor heredara su “espantoso hábito”, pues había encontrado papeles de regalo deshechos en lugares inesperados.

LOS RECUERDOS DE DIANA

Años después de la muerte de la princesa de Gales, William y Harry, que en ese momento tenían 15 y 12 años respectivamente, aún extrañan su presencia.

Cuando el duque de Sussex le propuso matrimonio a Meghan Markle en 2017, le dijo a un medio que extrañaba tener a su madre cerca, especialmente en ocasiones especiales. El duque de Cambridge también ha sido bastante sincero acerca de extrañar a su madre.

Una vez dijo que le hubiera encantado tener el consejo de la difunta princesa. También señaló que hubiera querido que Diana viera a sus nietos.

William reflexionó sobre su dolor por la muerte de su madre durante una entrevista que también protagonizó Harry. Y resultó que el duque mayor tardó 20 años en superar su dolor.

“Estoy en un lugar mejor respecto de lo que he estado durante mucho tiempo, donde puedo hablar sobre ella más abiertamente, con mayor honestidad, puedo recordarla mejor y hablar mejor públicamente sobre ella”, dijo el primogénito de la princesa.

Harry también reveló que estaba asombrado por el amor del público y la gran cantidad de emociones cuando Diana murió. El orgulloso hijo quedó impresionado por el efecto de su madre en las personas.

Sin embargo, a medida que avanzaba la entrevista, los hermanos se sumergieron en el lado divertido de Diana. Ambos contaron que ella era “muy informal” y que disfrutaba reírse.

Harry se refirió a la difunta princesa como una “madre traviesa”. Recordó cómo su madre les metía a escondidas algunos dulces en los calcetines cuando visitaba su escuela para verlos jugar al fútbol.

LOS RECUERDOS DE SU MADRE

El duque de Cambridge y el duque de Sussex no tienen más que elogios para su madre fallecida. Una vez en 2017, durante una entrevista, los hermanos reflexionaron sobre los recuerdos de su mamá.

Hablaron sobre el compromiso de Diana de hacer el bien “mientras nadie está mirando”. William y Harry dijeron que su madre era tan trabajadora como aparecía en las cámaras.

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Según expresó Harry, la difunta princesa dijo una vez que hacer que los niños se sintieran valorados producía resultados “tremendos”, y afirmó que así fue.