Enfermeros trasladan a papá para una radiografía y él ve a su hija esperándolo vestida de novia
Unas semanas antes de la boda de su hija, un hombre cayó gravemente enfermo y fue hospitalizado. El padre quedó destrozado cuando los médicos le dijeron que estaba demasiado enfermo para asistir al enlace.
En AmoMama, nos encanta compartir historias que defienden el amor, los vínculos familiares, la bondad y la esperanza, como es el caso de la historia de Janae Hauger y su papá.
Janae creció en Ohio, Estados Unidos, con sus padres Steve y Vicki Price. Tenía tres hermanas y un hermano y se crio en un ambiente conservador y cristiano. Sus progenitores siempre la animaron a mantener el amor y la fe inquebrantable en Dios.
Steve y Janae comparten un emotivo abrazo [Izquierda]; Janae baila con su padre mientras descansa su cabeza en su hombro. [Derecha] | Foto: Facebook.com/janae.r.price
Creció en una familia muy unida en la que se cenaba cada noche, no había excusas para faltar a la iglesia y la diversión era infinita. Pero, como muchos jóvenes, Janae quiso encontrar su camino durante la universidad y decidió seguir una ruta diferente.
Según Hauger, tomó malas decisiones y se unió a un chico que caminaba por un sendero desviado. La mujer dijo que estaba dispuesta a comprometer su fe y los valores que su familia le había enseñado para complacer a alguien que no tenía las mejores intenciones con ella.
ALEJÁNDOSE DE SU FAMILIA
Janae explicó que sus decisiones la alejaron de su familia, que desaprobaba su compañía. Además, añadió que sus deseos egoístas le impidieron escuchar los consejos de sus padres y, finalmente, se fue de casa.
Abandonar el hogar lo cambió todo para Hauger. Rompió su relación con sus padres y hermanos, Con el tiempo, empezó a sentirse sola, perdida y rota. Janae dijo que su conciencia la regañaba por haberle hecho daño a su familia.
VUELTA A CASA
Según la residente de Richwood la fe de sus padres en Jesús y la oración constante la ayudaron a encontrar el camino de vuelta a casa. Janae dijo que llegó a un punto en el que sintió un repentino despertar interior y nostalgia.
"Miré a mi alrededor y no vi nada familiar. Ni cenas cálidas con la familia, ni domingos por la mañana en la iglesia, ni risas en el salón con mis hermanas y hermano. No había abrazos de mi madre. Ni las buenas noches de mi padre", contó.
Poco después, se armó de valor para llamar a su madre. Hauger recordó que sintió miedo de enfrentarse a su padre, pero sus temores disminuyeron cuando él la recibió con calidez y amor. Entonces, volvió a empezar y comenzó a reconstruir su vida.
ENCONTRAR EL AMOR
Un par de años después, Janae conoció a un hombre llamado Jesse Hauger. Los dos tuvieron algunas citas y ella conectó al instante con él. Según la dama, Jesse era una persona divertida, de buen corazón y un seguidor de Cristo.
También se llevaba bien con la familia de ella, que lo acogía como a un hijo. Unos años más tarde, la pareja estaba en un viaje familiar a las Bahamas cuando Jesse sorprendió a Janae con una propuesta de matrimonio. La mujer dijo que sí inmediatamente.
La boda estaba prevista para el 11 de agosto de 2018 y Hauger vio cómo su padre trabajaba en la restauración del viejo granero de su familia para celebrar el enlace allí. Janae dijo que siempre había querido casarse en casa, y el gesto de su papá significó mucho para ella.
UN MOMENTO ESPECIAL
Aseguró que su padre trabajó con ahínco para restaurar el granero hasta que quedó perfecto. Veintinueve días antes de su boda, Janae se embarcó en unas vacaciones familiares a Nashville, Tennessee.
Antes de emprender el viaje, Jesse la ayudó a encontrar la mejor canción para su baile de padre e hija, llamada "It Won't Be Like This for Long" de Darius Rucker. Janae estaba encantada cuando descubrió que Rucker iba a actuar en Nashville.
Entonces, la futura novia hizo un cartel y lo sostuvo en alto, pidiendo al músico que tocara la canción. Rucker vio el cartel y sacó a bailar a Janae y a su padre, Steve. El momento se convirtió en un recuerdo especial para los dos.
NOTICIAS INESPERADAS
Una semana después de regresar de Nashville, Steve cayó gravemente enfermo y fue trasladado al hospital tras quejarse de dolores de estómago. Al hombre se le diagnosticó una pancreatitis aguda. Estuvo hospitalizado durante tres semanas y sufrió graves complicaciones de salud.
Steve fue trasladado al Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio, y la familia rezó por su pronta recuperación. Janae también esperaba que su padre estuviera mejor antes de su boda, ya que siempre había soñado con bailar con él en su gran día.
Pero a todos se les rompió el corazón cuando los médicos consideraron que Steve no podía salir del hospital dos días antes de la boda. La dama sabía que su padre siempre había querido llevar al altar a una de sus hijas.
UNA PROFUNDA CONEXIÓN
Aún más aplastante fue el hecho de que Steve había trabajado incansablemente en la restauración del viejo granero para la boda de Janae y el hecho de no estar allí le causaba un gran dolor.
"Compartimos un vínculo increíble y siempre hemos soñado con el día en que él pudiera llevarme al altar y compartir un baile de padre e hija conmigo. Cuando nos dijeron que no podría asistir a la boda y llevarme al altar, supe que al menos tenía que bailar con él", declaró.
Durante todo el tiempo que Steve estuvo en el hospital, Janae y su familia le cuidaron e hicieron todo lo posible por animarle. Pero la mujer dijo que podía ver que su padre intentaba mantenerse fuerte por ella. Le dijo: "Necesito ponerme mejor, y te vas a casar pase lo que pase".
BAILANDO SU CANCIÓN FAVORITA
Después de pensarlo mucho y con la ayuda de Jesse y su familia, Janae ideó un plan perfecto. "Decidimos que si papá no podía estar en la boda, llevaríamos la boda a papá", dijo. Coordinó con los enfermeros del hospital y preparó una gran sorpresa.
Unas horas antes de la boda, uno de los enfermeros le dijo a Steve que los médicos habían pedido una radiografía. Lo bajaron en silla de ruedas por los ascensores y pasillos y lo llevaron a una capilla, donde vio a Janae vestida con un traje de novia.
La dama describió que su papá lloró de alegría. Padre e hija bailaron su canción favorita, rodeados del resto de su familia. La novia dijo que fue un momento que atesorará para siempre.
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Cuando Janae y Jesse llegaron al lugar de la boda, hablaron con Steve por FaceTime y apreciaron su presencia virtual en la ceremonia. La dama llegó al altar con su hermano y su madre, pero su padre fue la primera persona que vio en la pantalla del iPad.
"Todos nos sentimos tranquilos porque mi padre pudo vernos. La boda fue increíble. Fue absolutamente perfecta. Hubiera preferido que estuviera allí. Pero, dadas las circunstancias, fue absolutamente hermosa", expresó.
Nos alegramos mucho de que Janae y Steve hayan disfrutado de su especial baile padre e hija, y esperamos que sigan creciendo en el amor. Si esta bonita historia te ha calentado el corazón, compártela con tus seres queridos.
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