Marido le compra una cartera a su esposa por su aniversario y encuentra una nota adentro que dice "¡Ayúdame lo antes posible!" - Historia del día
Una mujer abrió un bolso que compró en el mercadillo y vio un papel dentro. "¿Qué es esto?", dijo y lo sacó. No sabía que el mensaje escrito en él la llevaría a algo inesperado.
"Mira, Nick. ¡Este bolso está como nuevo!", señaló Jane hacia un carrito lleno de bolsas en el mercado de pulgas.
Jane y Nick estaban visitando el mercado de pulgas una semana antes de su segundo aniversario de bodas. Durante su última visita, compraron abrigos de diseñador a una fracción de sus precios, y ahora, Jane tenía los ojos puestos en un bolso antiguo.
“Sí, se ve bien. Pero ya tienes tantos bolsos en tu armario", dijo Nick.
"No tengo nada como esto. ¡Solo mira la calidad de este!", expresó Jane al deslizar su mano sobre el bolso.
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Nick miró a su esposa y negó con la cabeza. "No vamos a comprarlo, Jane", dijo.
De pie junto al carrito, Jane y Nick comenzaron a discutir. El dueño del carrito, alto y musculoso, miró a Nick mientras su esposa estaba detrás de él.
Unos momentos después, Jane comenzó a llorar. "¡Está bien, está bien! Lo siento. Te compraré el bolso. ¡Por favor deja de llorar!", suplicó Nick.
"¿Cuánto cuesta esto?", le preguntó Nick al comerciante.
La esposa del comerciante miró a Nick, pero no dijo nada. Una vez que el comerciante reveló el precio, Nick sacó su billetera de su bolsillo y le entregó el efectivo.
Sin embargo, mientras estaba parado, esperando para pagar, Nick sintió algo inusual. Sintió que la esposa del comerciante quería decirle algo, pero se quedó quieta y lo miró fijamente.
"¿Puedo ayudarle con algo?", le preguntó Nick a la frágil mujer.
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"Ella no puede hablar", respondió el comerciante con severidad. "Es muda".
"Oh, está bien", Nick le sonrió al hombre.
Antes de dejar el carrito, Nick notó que la esposa del tendero movía los labios para decir algo. Sin embargo, Nick se alejó porque Jane dijo que quería llegar a casa lo antes posible.
Después de llegar a casa, Jane se refrescó y se sentó en la cama para abrir su nueva posesión. "¡Esto es tan hermoso!", dijo mientras desabrochaba el bolsillo principal.
Su sonrisa se desvaneció de repente cuando vio un trozo de papel dentro de la cartera. “¿Qué es esto?”, se preguntó mientras lo sacaba. Desdobló el papel y leyó lo que estaba escrito en él.
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"¡Ayúdame! ¡Lo antes posible!", leyó Jane.
"¡Oye, Nick! ¡Mira lo que encontré aquí!", llamó a su marido desde la otra habitación.
"¿Qué pasa, cariño?", preguntó Nick preocupado.
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Luego, Jane le entregó la nota y le dijo que la encontró dentro del bolso nuevo. Las cejas de Nick se fruncieron y sus ojos se abrieron después de leer el texto porque pensó que sabía quién debía haberlo escrito.
"Es la mujer... ella quería decir algo", le dijo Nick a Jane.
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"¿Cuál mujer?", preguntó Jane.
"La esposa del comerciante", dijo Nick. "¿No notaste que movió los labios para decir algo antes de que nos fuéramos?"
"Pero el hombre dijo que ella no podía hablar, Nick", Jane se encogió de hombros. "Estás pensando demasiado".
"No, Jane", Nick negó con la cabeza. "Sé que este mensaje es de ella. Necesita nuestra ayuda".
Nick recogió el bolso y metió la nota dentro. "Regresaré al mercado de pulgas para ayudar a la mujer. Estoy seguro de que está en problemas y nos necesita, Jane", dijo.
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"Está bien, cariño", Jane abrazó a su marido. "¡Mantente a salvo!".
Nick condujo de regreso al mercado de pulgas y buscó el puesto donde habían comprado el bolso. Desafortunadamente, el hombre y su esposa ya no estaban allí. Cuando preguntó a los otros comerciantes por la pareja, se enteró de que se habían ido a casa.
“¿Debería decirles sobre la nota?”, se preguntó Nick. En lugar de revelar lo que encontró dentro del bolso, Nick preguntó a los otros comerciantes sobre la pareja.
"¿Alguna vez los viste pelear en el mercado?", preguntó Nick.
Todos los comerciantes negaron con la cabeza, pero Nick sintió que le estaban ocultando algo. Pensó que tenían miedo de decir la verdad.
"¿Puedes darme su dirección? Encontré algo preciado dentro de un bolso que compramos y quiero devolvérselo", mintió Nick.
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De todos los vendedores, solo una persona le dijo a Nick dónde vivían el hombre y su esposa. "Su nombre es Brad", reveló una mujer.
"¡Gracias!". Nick le sonrió y condujo hasta la casa de Brad.
Estaba a punto de oscurecer cuando Nick salió del mercado de pulgas y tuvo que conducir durante media hora para llegar a la casa de Brad. El comerciante y su esposa vivían en un tráiler estacionado entre arbustos en las afueras del pueblo.
Al llegar a la dirección, Nick estacionó su auto cerca del tráiler y apagó las luces. Vio dos siluetas en movimiento a través de las persianas que cubrían la ventana del remolque. "Parece que están peleando", dijo en voz alta.
Cuando Nick salió de su auto, pudo escuchar al hombre gritarle a su esposa. "Ciertamente necesita mi ayuda", precisó Nick y llamó a la puerta del remolque.
De repente, Brad se quedó en silencio y caminó hacia la puerta para ver quién estaba allí. Tener visitas era inusual ya que vivía lejos de la ciudad. "¿Quién es?", Brad refunfuñó y abrió las persianas para ver por la ventana.
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"¿Qué estás haciendo aquí?". Las cejas de Brad se juntaron y sus ojos se abrieron como platos. Estaba enojado al ver a Nick parado en su puerta. "¡Lárgate!"
Antes de que Nick pudiera responder, Brad bajó las persianas y apagó todas las luces dentro del tráiler para que Nick no viera nada.
"¡Oye! ¡Abre la puerta!", gritó Nick y llamó a la puerta, pero Brad no respondió.
“¿Qué hago ahora?”, se preguntó. Estaba seguro de que la esposa de Brad había puesto la nota en el bolso, pero no pudo ayudarla. No quería irse sin hablar con la señora.
"Señora, estoy aquí por usted", gritó Nick.
"Encienda la linterna de tu teléfono si estás en problemas. ¡La ayudaré!".
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Nick no estaba seguro de si este truco funcionaría, pero se paró afuera del tráiler en la oscuridad y esperó a que la mujer respondiera. Se quedó afuera durante unos quince minutos, pero ni Brad ni su esposa hicieron nada. Hubo un silencio absoluto dentro del remolque.
“¿Estará todo bien? ¿Por qué Brad no dice ni hace nada?” se preguntó Nick. Ya estaba cansado, pero no quería irse sin ver a la mujer.
Se quedó afuera del tráiler durante otros diez minutos, pero nadie respondió. “¿Estoy pensando demasiado? ¿Y si esa nota fuera de otra persona?”, se planteó Nick. Después de esperar unos minutos más, Nick se dio la vuelta para irse cuando vio una luz brillante.
"¡Sí!", exclamó Nick y corrió hacia la puerta del remolque. Antes de que pudiera tocar, escuchó a Brad gritarle a su esposa y sintió que algo caía al suelo. "¡Abre la puerta, Brad! ¡Abre la puerta ahora mismo!", gritó Nick.
Cuando Brad no respondió y siguió gritándole a su esposa, Nick pateó la puerta y la empujó con fuerza. Al final, se rompió por dentro. Brad lo miró fijamente y gritó: "¿Cómo te atreves a entrar en mi casa sin mi permiso? ¡Fuera!".
Nick vio a la esposa de Brad parada detrás de él y se dio cuenta de lo que estaba pasando. La esposa de Brad era víctima de violencia doméstica y necesitaba que alguien la ayudara.
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"¿Por qué estás mirando a mi esposa? ¿Qué quieres?", refunfuñó Brad y dio unos pasos hacia Nick. "Solo vine aquí porque...".
"¿Porque querías mirar a mi esposa? ¿Cómo la conoces?".
"No es nada de eso, Brad", dijo Nick. "No me malinterpretes".
Luego, Brad se volvió hacia su esposa y la miró fijamente. "¿Lo conoces?".
Asustada, sacudió la cabeza, temiendo que su marido volviera a perder los estribos. Entonces, Brad se volvió hacia Nick y señaló hacia la puerta.
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"¡Largo!", gritó Brad.
"No me iré hasta que dejes que tu esposa se vaya", respondió Nick con severidad. Cruzó los brazos sobre el pecho para mostrarle a Brad que no le tenía miedo.
"¿Ah, de verdad?", Brad dejó escapar una risa malvada. "¿Quieres que deje que mi esposa te acompañe, eh?".
"¡Ella no quiere vivir contigo!", gritó Nick.
"¿Así que ahora me vas a decir lo que quiere mi esposa?". Brad miró enojado a Nick y caminó hacia él.
Justo cuando Brad estaba a punto de atacar a Nick, escuchó las sirenas de los coches de policía acercándose a su remolque. "¿Llamaste a la policía?", gruñó Brad. "¡Pagarás por esto!".
Brad entró en su habitación y agarró una bolsa. "Me escaparé antes de que vengan aquí", dijo antes de salir corriendo por la puerta.
Dos coches de policía llegaron antes de que Brad pudiera irse e inmediatamente lo atraparon. Después de llevarlo dentro de la camioneta de la policía, los policías agradecieron a Nick por llamarlos.
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"Encontré esta nota dentro del bolso que mi esposa compró en el puesto de Brad", les dijo Nick.
Unos cuantos policías entraron al tráiler y le aseguraron a la esposa de Brad que estaba a salvo. “Por favor, venga con nosotros a la comisaría. Tiene que denunciar a su marido”, le dijeron.
Nick acompañó a la mujer a la comisaría, donde presentó una denuncia contra Brad. Allí, Nick se enteró de que su nombre era Anna.
Una vez que se presentó la denuncia, Anna salió de la estación de policía y planeó irse a casa. "¡Oye, Anna! ¿Por qué no vienes a mi casa? Quiero que conozcas a mi esposa, Jane", dijo Nick.
Nick llevó a Anna a casa y llamó a su esposa. "¡Jane! ¡Mira quién está aquí de visita!", dijo y le pidió a Anna que se sentara en la sala de estar.
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Una vez que llegó Jane, le presentó a Anna. "Ella es Anna. ¿Recuerdas que la conocimos esta mañana en el mercado de pulgas? Nos dejó esa nota", explicó Nick.
Jane abrazó a Anna y se entristeció cuando la mujer muda lloró a mares con la cabeza apoyada en el hombro de Jane. "Oye, oye. Está bien, Anna", Jane le frotó la espalda, tratando de calmarla.
"Estamos aquí para ti, Anna", dijo Nick. "Ese hombre no te volverá a lastimar. La policía le dará una lección".
Cuando Anna dejó de llorar, movió los labios para decir algo, pero no pudo hablar. "¿Debería traerte un bolígrafo y una hoja de papel?", preguntó Nick.
Cuando Anna asintió, rápidamente buscó un bolígrafo y se lo dio con una hoja de papel. Luego, Anna escribió su historia para Jane y Nick.
Ella les dijo que no era muda de nacimiento. Cuando era joven, se casó con un hombre rico que la amaba y la cuidaba. Desafortunadamente, murió cinco años después.
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Entonces, Anna conoció a Brad y se enamoró de él. Al principio, parecía un buen hombre. Ella pensó que viviría feliz con él, pero la verdad sobre su personalidad se reveló ante ella unas semanas después de que se casaron.
"Gastó todo mi dinero en un casino y me obligó a vender toda mi ropa, zapatos y bolsos de marca", leyó Jane. "A menudo perdía los estribos y tenía problemas con la bebida. Siempre tuve miedo de vivir con él".
Un día, Brad perdió todo su dinero en el casino y volvió a casa enojado. Cuando peleó con Anna, ella se estresó demasiado y perdió la capacidad de hablar.
"Desde ese día, no he dicho una palabra", leyó Jane. "Brad siempre le decía a la gente que yo era muda de nacimiento. Me hizo la vida imposible".
Después de enterarse de la desgarradora historia de Anna, Nick y Jane decidieron ayudarla. Pagaron por su tratamiento y le permitieron vivir con ellos hasta que pudiera encontrar un trabajo.
Mientras tanto, Nick se disculpó con Jane por gritarle y le prometió que nunca volvería a levantar la voz. "Te amo, Jane", le tomó la mano.
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"Lo siento por pelear contigo".
Unas semanas más tarde, Anna consiguió un trabajo y encontró un lugar seguro para vivir. Se mudó de la casa de Jane y Nick, pero prometió mantenerse en contacto con ellos.
Seis meses después, Anna y Jane crearon un grupo de apoyo para mujeres que sufrían violencia doméstica. Recaudaron fondos para esas mujeres y las ayudaron a vivir en un espacio seguro, lejos de los hombres que les hacían la vida imposible.
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¿Qué podemos aprender de esta historia?
- Alza tu voz contra la violencia doméstica: Callar equivale a apoyar al opresor. La gente debería hablar en contra como Nick y Jane.
- Siempre ayuda a los demás: Nick y Jane podrían haber ignorado el mensaje en el papel dentro del bolso, pero no lo hicieron. Localizaron a Brad y rescataron a su esposa.
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Esta pieza está inspirada en historias de la vida cotidiana de nuestros lectores y escrita por un escritor profesional. Cualquier parecido con nombres o ubicaciones reales es pura coincidencia. Todas las imágenes son sólo para fines ilustrativos. Comparte tu historia con nosotros; tal vez cambie la vida de alguien. Si desea compartir su historia, envíela a info@amomama.com.
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