Jennifer Grey estuvo a punto de quedar paralizada por una lesión y se volvió “invisible” tras operarse la nariz - Ahora es una cariñosa madre soltera

Jennifer Grey alcanzó una inmensa fama gracias a su papel en “Dirty Dancing”. Por desgracia, sufrió un accidente en el que murieron dos personas, lo que cambió su vida para siempre. Mientras intentaba volver al mundo de la interpretación, Grey se operó dos veces la nariz y más tarde le diagnosticaron cáncer.

Nacida el 26 de marzo de 1960 en Nueva York, Jennifer Grey procede de una familia de artistas y se incorporó al negocio en los años ochenta. Su padre, Joel Grey, era un actor, bailarín y cantante ganador de un Oscar y reconocido por su interpretación en “Cabaret”.

Su madre, Jo Wilder, solía ser actriz y cantante antes de dejar la industria para formar una familia. El abuelo de Grey, Mickey Katz, también era artista, conocido como músico y cómico.

Jennifer era una adolescente cuando se involucró en el alcohol, las drogas y las relaciones intensas, una vida que ella llegó a calificar de temeraria. Mientras disfrutaba de las fiestas, siguió una carrera como actriz y consiguió papeles en producciones conocidas.

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En 1984, apareció en sus tres primeras películas, “Red Dawn”, “The Cotton Club”, y “Reckless”. Sin embargo, se hizo famosa tras protagonizar las películas “Ferris Bueller’s Day Off” y “Dirty Dancing”, en 1986 y 1987 respectivamente.

Entre el final del rodaje de “Dirty Dancing” y el estreno de la película, Grey sufrió un grave accidente automovilístico.

Jennifer, que entonces tenía 27 años, dio vida al personaje de Frances “Baby” Houseman en “Dirty Dancing” y formó pareja con el difunto Patrick Swayze, su interés amoroso en la pantalla.

Cuando las cámaras dejaban de rodar, Grey y Swayze no tenían la relación perfecta, pero no les quedaba más remedio que tener química para la película. Ella dijo:

“Patrick era un tipo muy bueno y se preocupaba mucho por mí. Siempre estaba ahí para mí, y yo habría hecho cualquier cosa por él, pero también éramos como agua y aceite”.

La relación de los actores en la vida real causaba roces en la película y les permitía representar mejor sus papeles. Sin embargo, fue su último filme juntos.

“Dirty Dancing” era considerada una película que daba la bienvenida a la madurez, con un argumento que conquistó el corazón de Grey.

“Cuando leí el guion, sentí que estaba hecho para mí”, afirmó. Aunque la película se convirtió en un éxito masivo, la carrera de Grey se vino abajo poco después.

Jennifer Grey tenía toda una carrera por delante, pero un desafortunado accidente y una cirugía plástica cambiaron su trayectoria

Entre el final del rodaje de “Dirty Dancing” y el estreno de la película, Grey sufrió un grave accidente automovilístico. Ella y su novio en aquel entonces, el actor Matthew Broderick, colisionaron con otro vehículo en Irlanda del Norte.

Broderick, que conducía, se equivocó de carril y chocó frontalmente con un automóvil en el que murieron una madre y su hija. El actor fue acusado de conducción temeraria y estuvo hospitalizado un mes con una pierna rota.

Mientras tanto, Grey sufrió un latigazo cervical que afectó a su vida durante años. Ella decidió permanecer al lado de su entonces novio mientras se recuperaba, por lo que estuvo ausente durante la gira publicitaria de “Dirty Dancing”.

Como consecuencia del accidente y sus secuelas, Grey no disfrutó de los frutos de su éxito. También tuvo que lidiar con la culpa del superviviente. La actriz admitió que el accidente cambió su vida para siempre en más de un sentido. Ella añadió:

“Fue un accidente simple y llanamente trágico, y tuvo efectos traumáticos muy graves y duraderos en, estoy segura, Matthew, la familia de las otras mujeres, y en mí".

Como muchos romances de Hollywood, la relación de la pareja no duró. Grey y Broderick rompieron dos años después del trágico accidente.

Ella se había dado cuenta de que era joven cuando se convirtieron en pareja y eran menos maduros. No obstante, Jennifer estaba increíblemente enamorada de Broderick y aprendió mucho sobre sí misma durante la relación.

Volvió a hablar del impacto de la operación de nariz en 2012, revelando que había entrado en el quirófano como una celebridad y salió como una don nadie.

Más tarde inició una relación con la estrella de “Piratas del Caribe” Johnny Depp tras conocerse en una cita a ciegas. Estuvieron comprometidos durante algún tiempo, pero nunca llegaron a pasar por el altar.

Según Grey, varios incidentes acumulados contribuyeron a su ruptura, y agregó que, en muchos aspectos, Depp dejaba mucho que desear como pareja y a menudo se metía en líos.

Tras el accidente, Jennifer se sometió a una cirugía plástica por sugerencia de su madre. Jo Wilder quería que su hija tuviera más proyectos y creía que la rinoplastia le daría más papeles de reparto.

No es que Wilder encontrara a Grey menos guapa, pero pensaba que, como actriz, había algunas cosas que debía cambiar.

Jennifer se sometió a otra intervención en los años 90 para corregir una pequeña imperfección de su anterior operación de nariz. Sin embargo, la cirugía cambió su rostro hasta el punto de que algunos actores, entre ellos Michael Douglas, no la reconocían. Después de su segunda rinoplastia, se volvió invisible para los demás.

“A los ojos del mundo, ya no era yo”, dijo. El resultado de la intervención fue desastroso: los amigos íntimos de Jennifer apenas la reconocían. Los agentes también dejaron de llamarla para posibles proyectos, lo que ralentizó su carrera.

Cuando se sometió a la corrección, Grey ya había comenzado a perder el interés en Hollywood y prefería convertirse en madre y esposa. Sin embargo, no fue hasta muchos años después que se casó y tuvo un hijo.

Jennifer habló de su horrible rinoplastia durante una entrevista en 2004 con In Touch Weekly, comparando la experiencia con sacarse una muela. No se parecía en nada a sí misma después de la operación.

Volvió a hablar del impacto de la operación de nariz en 2012, revelando que había entrado en el quirófano como una celebridad y salió como una don nadie.

Grey sufría terribles dolores y creía que ya no podría seguir adelante en el concurso. Llamó a su cirujano de cuello llorando por el dolor.

Aunque aún conseguía papeles en cine y televisión, nada se comparaba con el éxito de “Dirty Dancing”. Las cosas empeoraron cuando se unió a “Dancing with the Stars” años más tarde, ya que descubrió una terrible enfermedad.

A Jennifer Grey le diagnosticaron otros problemas de salud derivados del accidente

El accidente no sólo cambió la carrera de Grey, sino que también afectó su salud. Desde 1987, ha estado padeciendo de dolores crónicos a causa de la lesión cervical que sufrió durante el accidente automovilístico. Sin embargo, no fue hasta su participación en “Dancing With The Stars” cuando descubrió su dolencia.

En 2009, antes de incorporarse al programa, un chequeo físico rutinario mostró la columna vertebral anormal de Grey. Sus reflejos eran bruscos, lo que indicaba que una fuerza presionaba su médula espinal. Resultó que el cuello de Grey tenía una curvatura pronunciada y, según el médico, “había deslizamiento de una vértebra sobre otra”.

Esto significaba que un movimiento en falso, una caída, otro accidente de auto o incluso un movimiento brusco de cabeza podrían haber dejado a la actriz paralizada.

Cuando llegó la final, Grey sufría terribles dolores y creía que ya no podría seguir adelante en el concurso. Llamó a su cirujano de cuello llorando por el dolor y pronto descubrió que tenía una hernia discal o un disco roto.

Los médicos también descubrieron que tenía cáncer de tiroides desde hacía años, lo que empeoraba su situación. La estrella de Hollywood dijo:

“El médico que me miró la columna me dijo que no sólo no debería subirme a un automóvil, sino que tenía suerte de no estar paralizada, que la cabeza me colgaba de la columna y que por eso llevaba 20 años sufriendo”.

Aun así, Grey quería terminar su etapa en el famoso concurso de baile. Trabajando con su médico, el Dr. Robert Bray, cirujano neurológico de cuello y director médico del D.I.S.C. Sports Spine Center de California, hizo todo lo posible por bailar con cuidado.

Grey y Clark Gregg se casaron el 21 de julio de 2001, unos meses antes de que naciera su hija, Stella. Gregg también trabajaba en el mundo del entretenimiento como actor y director.

Le ponían inyecciones epidurales de esteroides para controlar el dolor y la evaluaban antes y después de bailar. Según el médico, Grey seguía teniendo las piernas fuertes y realizaba pequeñas actuaciones que no empeoraban aún más su estado de salud.

La gravedad de la situación dio lugar a varias intervenciones quirúrgicas en el mismo año: el médico de Grey reveló que se había sometido a cuatro cirugías de cuello en 2010, incluida una para insertarle una placa en el cuello. Grey también se sometió a procedimientos para extirpar la tiroides cancerosa.

Su paso por “Dancing With The Stars” no sólo le dio alegrías a Grey, sino que también le salvó la vida. Ella también veía el lado positivo del accidente, diciendo: “En cierto modo, el accidente que pensaba que había sido quizá una de las peores cosas que me habían pasado, me salvó la vida”.

Jennifer Grey se divorció de su esposo, Clark Gregg, en 2020 y tiene una hija preciosa

Mientras Grey experimentaba dificultades en su salud, tenía a su lado a su entonces esposo. Jennifer y Clark Gregg se casaron el 21 de julio de 2001, unos meses antes de que naciera su hija, Stella. Gregg también trabajaba en la industria del entretenimiento como actor y director.

Es más reconocido por su trabajo en las franquicias de Marvel “Captain America”, “Agents of SHIELD”, “Iron Man”, “Iron Man 2”, “Captain Marvel”, “Thor” y “The Avengers”. También compartió pantalla con Grey en la película de 2006 “The Road to Christmas”.

La pareja vivió casi dos décadas de felicidad conyugal hasta su separación en 2020. El divorcio llegó por sorpresa, ya que la pareja salía a menudo y practicaba rutinas de baile.

Parece que Stella tenía en mente seguir los pasos de sus padres. En 2013, apareció con su padre en la película "Trust Me" y en un episodio de "Agents of SHIELD" en 2017.

La pareja anunció su separación en Instagram, señalando que su ruptura amistosa ocurrió a principios de año. Jennifer escribió:

“Nos separamos en enero, sabiendo que siempre seríamos una familia que se ama, valora y cuida. Recientemente decidimos divorciarnos, pero seguimos muy unidos y estamos profundamente agradecidos por la vida que hemos compartido”.

Sólo un mes antes de su doloroso anuncio, la actriz rindió homenaje a Clark Gregg durante el Día del Padre por ser un padre increíble. En agosto de ese mismo año, Gregg solicitó oficialmente el divorcio en el condado de Los Ángeles.

Según la orden judicial, Grey retenía las ganancias de sus películas, pero tenía derecho a la mitad de los derechos de autor de su exesposo.

Stella Gregg ya tenía 18 años durante la separación de sus padres, pero éstos acordaron compartir las responsabilidades relativas a ella hasta que tuviera 24 años. Jennifer y Clark estuvieron presentes durante su graduación de la secundaria e incluso se hicieron fotos en familia, lo que demuestra que están unidos en los asuntos que conciernen a su única hija.

Parece que Stella tenía en mente seguir los pasos de sus padres. En 2013 apareció junto a su papá en la película “Trust Me” y en un episodio de “Agents of SHIELD” en 2017.

Aunque Grey disfruta de su carrera como actriz, también le gusta la vida relajada. Anteriormente, compartió una foto de sí misma sin casi maquillaje, relajándose con un traje de baño negro y gafas de sol.

A Grey le gusta vivir en privado, pero en enero de 2023 celebró el cumpleaños número 21 de su hija con un dulce homenaje en Instagram. La actriz suele compartir una instantánea de Stella en ocasiones especiales, y cada vez, la preciosa chica se parece más y más a su madre.

El 2023 empezó muy bien para Jennifer, que consiguió un papel en una película. Su amiga Jamie Lee-Curtis promocionó la última película de Grey, “Gwen Shamblin: Starving for Salvation”. La estrella de “Dirty Dancing” estaba guapísima vestida para el papel, y los fans no pueden esperar a ver su actuación.

Aunque Grey disfruta de su carrera como actriz, también le gusta la vida relajada. Anteriormente, compartió una foto de sí misma sin casi maquillaje, relajándose con un traje de baño negro y gafas de sol.

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No cabe duda de que Jennifer ha pasado por muchas cosas como actriz y como persona. Sin embargo, sigue siendo feliz con su vida actual, tanto familiar como profesional. Gracias a su película clásica “Dirty Dancing”, ella sigue siendo un nombre conocido entre distintas generaciones.

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