Mi suegra me exige más de 200 dólares por limpiar mi casa - Pero nunca le pedí que lo hiciera

Mientras una mujer estaba con su pareja en el hospital esperando a su bebé, la suegra les echó una mano. Se ofreció para dar de comer a sus perros, un gesto que agradecieron profundamente. A su regreso, la pareja encontró una nota pegada al refrigerador, cuyo contenido los dejó estupefactos.

El 9 de octubre de 2023, una mujer anónima acudió al subreddit "AITA" (donde la gente comparte situaciones para consultar si frente a un conflicto están equivocados o tienen razón) para compartir su desconcertante experiencia. La mujer, de 31 años, trajo al mundo a su precioso hijo hace una semana, a pesar de las complicaciones que la mantuvieron en el hospital hasta el 8 de octubre.

Agradecida por estar de vuelta en casa con su recién nacido, reflexionó sobre el inesperado giro de los acontecimientos. Cuando rompió aguas, ella y su marido, de 33 años, estaban en casa, y ni pensaron en la limpieza. Con las prisas por ir al hospital, simplemente tiraron unas toallas sobre la alfombra del dormitorio y se fueron.

¿Un dulce gesto o algo más?

Durante su estancia en el hospital, la suegra de la mujer, de 59 años, se ofreció amablemente a dar de comer a sus perros, un gesto que la pareja agradeció sinceramente. Sin embargo, al volver a casa, la mujer descubrió una nota y un recibo en la nevera. Para su sorpresa, su suegra se había encargado de limpiar no sólo la alfombra del dormitorio, sino toda la casa.

Abrumada por la afluencia de mensajes, la redditor decidió apagar el teléfono, buscando un respiro a la situación.

La nota detallaba los gastos de limpieza, incluido un día de trabajo a 25 $ la hora y 200 $ en productos de limpieza. Dejó a la mujer totalmente conmocionada por esta inesperada petición de reembolso. "Aunque fue muy amable de su parte limpiarme la alfombra y luego el resto de la casa, ninguno de los dos le pedimos que lo hiciera", añadió.

¿Qué hizo el esposo?

En respuesta a la inesperada demanda, el marido de la autora tomó la iniciativa de abordar la situación. Escribió un mensaje a su madre, expresándole su gratitud por su ayuda durante la estancia en el hospital. Sin embargo, no pudo evitar expresar su preocupación por sus acciones:

"Hola mamá, te agradecemos mucho tu ayuda estos últimos días mientras [mi esposa] estaba en el hospital. Fue estupendo tener a alguien que cuidara de los perros".

El hombre escribió que él y su esposa se habían topado con la nota y el recibo pegados en la nevera. Lo que les sorprendió fue que la suegra se hubiera dedicado a husmear en su casa, ya que ninguno de los dos le había informado de que la mujer había roto aguas en el dormitorio.

En segundo lugar, la pareja también quedó desconcertada al saber que la suegra había comprado productos de limpieza por valor de cientos de dólares y exigía dinero tanto por ellos como por su tiempo limpiando la casa. También querían saber dónde estaban esos artículos de limpieza, esperando que se les pagara lo que habían pagado por ellos.

"Cuando te confiamos los perros, pensamos de verdad que nos ayudabas de corazón y no por darte la oportunidad de ganar dinero rápido. Somos familia y nos duele que hicieras algo así mientras [mi mujer] estaba tan mal", concluyó el marido.

La reacción de la madre

Al recibir el mensaje de su marido, la suegra respondió inmediatamente, insistiendo en que sus acciones habían sido fruto de la bondad y que no podía comprender su ingratitud. La mujer también recibió mensajes de los miembros de la familia alabando los esfuerzos de la suegra a pesar de su avanzada edad, destacando su ayuda como un gesto de amor.

Abrumada por la afluencia de mensajes, la joven madre decidió apagar el teléfono, buscando un respiro a la situación. Mientras tanto, su marido seguía recibiendo críticas de su familia, que la acusaba de manipular la situación y de presentar injustamente a la madre como la villana, a pesar de su intención de preparar la casa para el bebé.

Sintiéndose profundamente disgustada por toda la situación, la mujer se encontró en desacuerdo con la sugerencia de su marido. Él propuso pagar a su madre para acallar las críticas de la familia ampliada y permitirles centrarse en su nuevo papel de padres. Sin embargo, la mujer se opuso firmemente a la idea de compensar económicamente a su madre por sus actos.

En medio de la confusión, la suegra envió otro mensaje a la pareja, expresando su voluntad de regalarles los productos de limpieza, eliminando así ese gasto de su factura. A pesar de este gesto, insistió en que le pagaran por su tiempo, alegando que el proceso de limpieza era "un riesgo biológico".

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La mujer se encontró atrapada entre el deseo de paz de su marido y su reticencia a ceder, dividida entre la armonía familiar y sus principios. "¿Soy yo la que está mal por negarme a pagarle a mi suegra?", se preguntó.

¿Qué opinan los Redditors?

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¿Qué opinas de esta historia? ¿Hizo bien esta mujer en no pagar a su suegra, o debería haberlo hecho ya que ésta afirmaba haber limpiado la casa desinteresadamente?

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