Madre afligida habla de su culpa después de que su bebé recién nacido murió durante el parto en el hogar
Estos padres primerizos soñaban con tener un bebé. Se suponía que el nacimiento de su hija sería uno de los mejores días en la vida de esta pareja.
En la fecha fijada para el parto de de Aimee Green, el 29 de noviembre de 2017, la joven de 23 años dijo que estaba ansiosa por conocer a su niña recién nacida, Luna Valentina Conroy. Según reseñó Shared, Aimee describió su experiencia de parto en su blog personal.
Ella dijo que su novio Ryan Conroy preparó su sala de estar para un parto natural en el hogar.
Aimee escribió: “Incluso hasta el día de hoy, mi trabajo sigue siendo un recuerdo increíble. Tranquilo, cómodo e incluso mejor de lo que había imaginado. Fue una perfección absoluta y no hubiera cambiado nada”.
Llegaron sus parteras y comenzó a prepararse mentalmente para largas horas de trabajo de parto. Ella tenía cuatro parteras para el nacimiento de su hija, y dijo que el dolor del alumbramiento natural era indescriptible.
“Pujé tan fuerte que pensé que mis órganos saldrían con ella, ¡pero eso fue todo! ¡Ella estuvo aquí! ¡Oh Dios mío!”, relató Aimee en su página de internet.
Cerca del final de su etapa de empuje, recordó haber tenido una sensación de alivio. Aimee dijo que esperaba un sentimiento de euforia en su último empujón. Sin embargo, cuando Luna nació, ella supo que algo estaba mal.
Miró las caras de Ryan y de su partera. Definitivamente algo malo había sucedido.
Ella notó que Ryan y la mujer no estaban sonriendo. Luego preguntó: "¿Por qué no está llorando, qué está pasando?".
La partera le entregó a Luna a su madre, y ella dijo que la pequeña se sentía como un "bebé gelatina".
Aimee recordó a la partera llamando a una ambulancia e intentando resucitar a Luna. Pero ya era demasiado tarde. A pesar de los mejores esfuerzos del equipo médico, el cordón umbilical de Luna se rompió y eso causó su muerte durante el parto, informó The Herald.
En su blog Aimee describe cómo se sintió el día que perdió a su hija:
“Me sentí como si hubiera sido golpeada por un tren, mi estómago había sido pateado, retorcido y estampado. Solo sollocé. [...] Sollocé mi corazón con tanta fuerza que no pude respirar. Mi corazón se rompió en mil millones de pedazos, y lloré inconsolable por lo que pareció una vida”.
Aimee preguntó por qué su hija falleció. “Nunca he fumado y no toqué ni una gota de alcohol. Dormí en mi lado izquierdo religiosamente todas las noches. Me mantuve activa, comí bien, ¿qué me había perdido y había hecho mal?”.
La joven de 23 años también recordó sentirse culpable y haberse recriminado a sí misma por la muerte de la bebé.
“Fue mi culpa, ¿por qué tuve un parto en casa, por qué no los escuché a todos y tuve un parto en el hospital, por qué fue ella una bebé feliz por 11 horas de trabajo de parto, pero no en los últimos minutos? ¿Qué había hecho? ¿Cómo iba a [disculparme] con Ryan? ¿Qué pasa si él se desamoró de mí? ¿No puedo perderlo también? Mi familia me odia”.
Las esperanzas de Aimee y Ryan por una familia se hicieron añicos después de que Luna murió durante el nacimiento. Sin embargo, la valiente pareja quería que algo bueno viniera de su trágica experiencia.
Después de su desgarradora pérdida, establecieron una organización benéfica para ayudar a familias en situaciones similares a reconstruir sus vidas.
Aimee escribió en la página de caridad de su Fondo Luna:
“En los últimos tres meses, hemos [aprendido] que Luna nació en este mundo loco para marcar la diferencia e impactar las vidas de las personas. [...] Los recuerdos, el dinero y el tiempo han sido cruciales en nuestro proceso de recuperación y es importante que todas las familias afligidas tengan acceso a estos”.
Y añadió: “Por la memoria de nuestra hija es nuestra misión hacer que esto suceda, y eso es exactamente lo que tenemos la intención de hacer”.
El Fondo de Luna significa "Amor y unidad para neonatos y mortinatos". La esperanza de Aimee y Ryan es ofrecer apoyo financiero a las familias que se recuperan de la muerte fetal o tras el parto.
Mira el video a continuación:
De acuerdo con Baby Center, los accidentes que involucran el cordón umbilical durante el trabajo de parto contribuyen a un pequeño número de mortinatos. Explicó que estos accidentes ocurren cuando:
“Hay un nudo en el cordón o cuando el cordón no está unido a la placenta correctamente, el bebé puede verse privado de oxígeno. Las anormalidades en el cordón umbilical son comunes entre los bebés sanos, y rara vez son la principal causa de muerte fetal”.
En una publicación de blog reciente titulada "Diciendo Goobye", Aimee escribió que todavía está afligida. Y recuerda todo acerca de Luna aunque solo la abrazó por momentos.
“Agradecí a los cielos por mi memoria fotográfica porque esto es lo que me ha ayudado a revivir, retener y referir cada detalle”.
Aimee y Ryan todavía están consternados. Sin embargo, planean casarse el próximo año en el cumpleaños de Luna, el 29 de noviembre: "Qué mejor manera de celebrar su vida".