Enfermeras hacen todo para que un paciente mayor pueda ser bautizado por su propio hijo

Los terapeutas y las enfermeras hicieron todo lo posible para ayudar a este hombre, que ya es un anciano, a bautizarse.

Los médicos, terapeutas y las enfermera hacen un trabajo excepcional, y definitivamente no todo el mundo se puede dedicar a hacer este trabajo tan comprometido.

Estas personas son capaces de estar trabajando por muchas horas a disposición de todos los que lo necesitan, sacrificando sus vidas para salvar las de los demás.

Estas personas que trabajan en el servicio médico, a su vez, son también personas que tienen historias locas de los pacientes, muchas de ellas historias tristes, pero siempre están presentes y en modo de ayuda.

The Western Journal comenta el caso de la clínica Adena Rehab en Greenfield, Ohio, y sus enfermeras y terapeutas como testigos de lo que pasó.

Dale Hodson, de 85 años de edad, es un paciente residente de Ohio. En 2005 recibió dos fuertes golpes y por esto tuvo problemas para usar su lado derecho. Después de un largo periodo en el que su salud decayó, Hodson se convirtió en residente de Adena Rehab.

Su hijo, Matthew Hodson, se preocupó bastante por su bienestar espiritual mientras estaba en la clínica, y a pesar de que su padre siempre le decía que se sentía bien, él sabía que no era así.

Después de un tiempo su padre le confiesa que quiere dar su vida a Cristo y quiere ser bautizado. Pero era muy difícil porque su padre no podía trasladarse a ningún lado por su condición física.

Su hijo, Matthew, hizo todo lo posible para apoyar el bautizo de su padre, pensando en darle la maravillosa oportunidad de ser bautizado ahí mismo, en Adena Rehab.

Fue entonces como los terapeutas ocupacionales y las enfermeras intervinieron para ayudar con esta hermosa idea. Uno de los terapeutas lo llamó para ofrecerle una idea de cómo hacerlo. Le propuso inflar una piscina afuera y ponerle agua caliente y bautizarlo allí.

Con el plan ya ejecutado, en la mañana del 24 de abril, Dale Hodson fue bautizado frente a su familia y amigos.

Después de esto se puede decir que nunca es tarde para cumplir un propósito, sin importar lo difícil, lo pequeño o lo grande que sea. La decisión de Dale Hodson sacó muchas lágrimas de alegría e inspiración a los asistentes.