Rescatistas intentan desesperadamente encontrar a equipo de fútbol juvenil atrapado en una cueva
Cerca de mil soldados y civiles se han unido a expertos en un esfuerzo desesperado por rescatar a 12 jóvenes y su entrenador de fútbol atrapados por las inundaciones en una cueva en el norte de Tailandia desde hace más de una semana.
Se cree que los jóvenes entre las edades de 11 y 16 años, y su entrenador asistente, Ekkapol Chantawong, de 25 años, entraron en la cueva Tham Luang después de la práctica el 23 de junio.
Según Time, pretendían hacer una caminata de cinco horas, sin embargo, las intensas lluvias inundaron varias cámaras de la cueva y bloquearon la salida.
Los rescatistas trataron de extraer el agua para que los buzos y los médicos pudieran alcanzarlos, pero los días que siguieron solo trajeron más aguaceros.
Luego, las autoridades comenzaron a buscar entradas alternativas en la montaña, pero encontraron pocas opciones viables. Más de una semana después, el tiempo se agota.
Imagen tomada de: YouTube/HispanTV
La búsqueda de los niños desaparecidos y su entrenador se ha apoderado de la nación. Los voluntarios celebran vigilias en escuelas y templos de todo el país.
Los usuarios de redes sociales crearon etiquetas para llamar la atención y los residentes se han ofrecido voluntariamente para cocinar, limpiar y apoyar a las familias de los niños.
Han mantenido la esperanza durante diez días mientras las autoridades tailandesas hacen todo lo posible para establecer contacto con los desaparecidos.
El sistema de cuevas ThamLuang es un complejo en expansión debajo de la montaña Nang Non que marca la frontera entre Tailandia y Myanmar al norte.
Las autoridades esperan que el equipo desaparecido llegue a una espaciosa caverna de la cueva, donde el terreno es alto y es probable que esté sobre el nivel del agua.
Se espera que las aberturas pequeñas proporcionen suficiente oxígeno, mientras que las fuentes suministren agua dulce.
Además de algunas pertenencias diseminadas en las cámaras anteriores de la cueva, no ha habido ninguna señal directa de los chicos y su entrenador.
Los buzos aún no han podido llegar a la cámara debido a las condiciones extremadamente difíciles, mientras que los escaladores todavía buscan chimeneas que conduzcan a la caverna desde arriba.
El gobernador de ChiangRai, NarongsakOsottanakorn, dijo el domingo que una salida convencional a través de la boca de la cueva es el escenario más probable.
El aumento del nivel del agua los obligó a suspender la exploración varias veces. Para el miércoles, las autoridades tailandesas habían pedido ayuda.
Trece ambulancias están esperando para transportar a los sobrevivientes al Hospital General de la Región de Chiang Rai, donde se ha despejado un piso entero para recibirlos.
Médicos, enfermeras y especialistas en salud mental están disponibles para tratar traumas, fallas de órganos y enfermedades infecciosas en caso de que alguien se encuentre con vida.
Los paramédicos, soldados y voluntarios llevaron a cabo con éxito un simulacro de evacuación el sábado.
Si se encuentran vivos, el mayor obstáculo para su supervivencia será transportarlos a través de túneles aún inundados hasta la boca de la cueva.
A pesar de las dificultades, los rescatistas siguen comprometidos con la misión y dicen que no abandonarán los esfuerzos hasta que se encuentren los 13 desaparecidos.