Niño de 3 años muere tras pasar varias horas dentro de autobús de guardería
En los Estados Unidos, las muertes por automóviles calientes son un problema constante.
Un niño de 3 años, identificado como Raymond Pryer, fue encontrado muerto en un autobús afuera de su guardería en el noroeste de Houston, Texas.
El fallecimiento del menor ocurrió después de que aparentemente fue dejado dentro del vehículo luego de un viaje de campo, debido a que las temperaturas afuera se dispararon a casi 37.7 grados Celsius.
El niño era uno de los 28 estudiantes de la "Discovering Me Academy" que fueron llevados en un autobús el pasado jueves 19 de julio a un parque cercano para un viaje de campo más temprano en el día, dijo la oficina del alguacil del condado de Harris, reseña ABC 13.
La policía de Houston dijo durante una conferencia de prensa el viernes que los niños fueron subidos al autobús alrededor de las 10 a.m. y fueron a Doss Park. El grupo regresó a la guardería entre las 2 y las 2:30 p.m.
Los registros escolares muestran que el niño de 3 años había sido incluido en una lista de estudiantes, dijo la oficina del alguacil. Fue solo cuando el padre del niño fue a buscarlo a las 6:30 p.m. que los funcionarios descubrieron que el pequeño todavía estaba en el autobús.
Se descubrió que no respondía, y la temperatura dentro del vehículo era de 45 grados Celcius, dijo la oficina del alguacil.
Los investigadores creen que el menor fue dejado dentro del autobús por al menos tres horas y media. El niño fue transportado al hospital y declarado muerto a las 7:45 p.m.
La policía está investigando las acciones de los dos cuidadores y las instalaciones como parte de su investigación, declaró la policía durante la conferencia de prensa del viernes. CNN se comunicó con la academia para obtener comentarios al respecto.
Los agentes entrevistaron al conductor del autobús y a un acompañante que estaba en la excursión, y se dice que ambos cooperan con la investigación.
"Este es solo un incidente más donde sucedió algo que no debía haber sucedido", dijo el viernes Bobby Dobbins, jefe adjunto del Departamento de Policía de Houston, a los periodistas. "Y terminó trágicamente".
Las autoridades también instaron a los padres y cuidadores a mirar siempre dentro y alrededor de su vehículo antes de abandonarlo.
En los EE. UU., las muertes por automóviles calientes son un problema constante. Según la organización de seguridad Kids and Cars, un promedio de 37 niños mueren cada año por quedarse dentro de autos calientes.
Según NoHeatStroke.org, Texas tuvo la mayor cantidad de muertes entre 1998 y 2015, y el mes de julio suele ser el mes más mortífero.