La fuerte promesa de un papá a su hijo con cáncer terminal cuando le dijo "Papá, necesito abandonar"
Ayden, de 10 años, fue diagnosticado con una rara forma de cáncer y los doctores le dijeron a su padre que le quedaban entre ocho a doce meses más de vida.
Los especialistas explicaron que Ayden tenía cáncer cerebral y la noticia fue devastadora para su familia.
Fue especialmente duro para Bill Kohler, quien hizo todo lo posible para salvar a su hijo, aunque nada parecía ser suficiente, como lo reveló Humankind en Youtube.
Antes de ser diagnosticado con la enfermedad, Ayden era un niño activo y que amaba los deportes, pero su vida cambió después de sentir un mareo.
Según información de The Western Journal el niño fue llevado al hospital luego de que se desmayara en una práctica de fútbol.
Aunque al principio los doctores dijeron que tenía una simple conmoción cerebral, era solo el inicio de los síntomas que finalmente revelarían algo mucho más serio.
SUS HABILIDADES DISMINUYERON
Sus habilidades para caminar, moverse y hablar disminuían rápidamente y nuevas pruebas revelaron que tenía no solo uno, sino dos tumores cerebrales.
Aunque su familia intentó hacer hasta lo imposible para ayudarlo, finalmente debieron aceptar el hecho de que Ayden no iba a sobrevivir.
Por ello, Bill le prometió a su hijo una cosa: haría todo lo posible para que los últimos días fueran los mejores de toda su vida.
De acuerdo a reportes de Newsner, Ayden le dijo a su padre que estaba listo para partir, pero su padre no se rindió y le dio la mejor de las despedidas.
Conoció a sus héroes favoritos, lo llevó en viajes de caza, e incluso le hizo una fiesta por su cumpleaños número 10.
Sin embargo, llegó el día en el que Ayden no podía caminar y luchaba por respirar. El pequeño incluso le dijo a su padre: “Papá, tengo que renunciar”.
Ningún padre quiere escuchar estas palabras, pero Bill le prometió que había hecho un buen trabajo luchando y que “estaba bien si renunciaba”.
Ayden falleció el 22 de marzo de 2017, tan solo siete meses después de su diagnóstico.
LA CONMOVEDORA ÚLTIMA FIESTA DE NIÑA CON ENFERMEDAD TERMINAL
Lila May Schow, de 5 años, luchó contra el cáncer de neuroblastoma en etapa 4 durante poco más de tres años.
En 2015, dejó de recibir tratamientos de quimioterapia porque ya su cuerpo no era lo suficientemente fuerte. Por esto sus padres decidieron darle la mejor fiesta de su vida.
Organizaron una celebración muy especial con la ayuda de empresas locales, donaciones y voluntarios. Si quieres conocer más sobre la historia de Lila haz click aquí.