Aullante perrito husky hace tremenda pataleta para salir de embrollo

Un husky fue captado en cámara “discutiendo” con su dueña y el resultado fue increíble e hilarante.

En el clip compartido en Instagram aparece el perro, llamado Blu, sentado en el medio de una habitación con suelo de madera con una caja frente a él, mientras una mujer, cuya identidad aún no se ha revelado, lo regaña.

El lindo perrito intenta usar su ternura y aullidos fuertes para crear una discusión por sí mismo mientras trata de amortiguar la voz enojada de su propietaria.

El parlanchín husky es muy firme en cuanto a no permitir que a la mujer se le escuche una palabra, mientras ella le pregunta quién fue el responsable de destruir la caja de cartón en el piso.

MEJOR AMIGO DEL HOMBRE

Los animales pueden ser grandes compañeros, pero también pueden resultar algo problemáticos y meterse en muchos problemas, que, finalmente, terminan con algo que se rompe.

En el caso de Blu, y de acuerdo con la leyenda que acompaña al video publicado en la red social, él estaba tratando de ayudar a su 'papá' al comerse la caja que contenía las piezas del automóvil antes de que 'mamá' las viera.

SOLO QUISO AYUDAR

Aparentemente, el ‘papá’ de Blu ha gastado mucho dinero en piezas de automóvil, por lo que el perrito cree que podría resolver el problema simplemente rompiendo la caja en pedazos.

Pero, en lugar de ser considerado un buen chico, Blu fue regañado por su ‘madre’, que no apreciaba el hecho de que el Husky había dañado la caja.

DEBE SER ALGO DE LOS HUSKY

Se puede ver al husky acallando la voz de su dueña con sus aullidos durante todo el video.

Al final del clip, Blu baja un poco el tono de sus aullidos cuando su dueña se le acerca un poco más y le dice que es un chico malo por dañar la caja de los repuestos, y termina con el perrito sentándose y bajando la cabeza tras el regaño.

Pero los perros pueden ser más que bolas de pelos traviesas. Por ejemplo, un husky llamado Cymber se volvió viral recientemente después de permitir que una mariposa descansara sobre su hocico y el Internet sufrió una sobrecarga de ternura.