Niña va a hospital por dolor, la envían a su casa y fallece horas después

Una niña de 4 años de edad muere de meningitis, unas horas después de haber sido alejada del hospital con “amigdalitis”.

Este padre, afligido por tal situación, contó la historia de su hija de cuatro años, quien muere de meningitis apenas unas horas después de haber sido dada de alta del hospital y diagnosticada con "amigdalitis". Mirror tiene la noticia.

Gracie Foster estaba esperando para someterse a una amigdalectomía en el Chesterfield Royal Hospital en Calow, Derbyshire, cuando comenzó a enfermarse y sentirse "somnolienta".

Los médicos le diagnosticaron amigdalitis en el hospital, antes de cancelar la operación y enviarla a casa con Calpol, según comenta su padre, Daniel Foster.

Pero horas después de haber ocurrido esto, a Gracie la tuvieron que trasladar a un hospital diferente después de que su cuerpo empezara a “tostarse”, y ella comenzara a luchar para hablar o respirar, como lo describe su padre.

Fue solo cuando llegó a las instalaciones que desarrolló el síntoma característico de la meningitis: una erupción púrpura violenta, dándose cuenta su padre de que en el hospital anterior se habían equivocado de diagnóstico.

Los médicos lucharon para salvar a la niña, pero su corazón se detuvo dos veces y ella falleció trágicamente esa misma noche.

El chef, que también está recaudando fondos en la memoria de Gracie, le dijo a Mirror: "Después de que la enviaron a casa, se quedó dormida y su temperatura se disparó”.

"Se podía decir que no tenía razón porque no tenía sarpullido. Sin embargo, comenzaba a tener manchas en su costado cuando los médicos la estiraban".

Dijo que su hija estaba cubierta de manchas cuando murió esa noche, aunque 12 horas antes, ella había estado sintiéndose un poco mejor.

El error del hospital que canceló la cirugía de la menor fue no haber realizado los exámenes pertinentes. En muchos hospitales, las amigdalectomías pueden cancelarse si el paciente sufre de amigdalitis aguda el día de la admisión.

“Ella vomitó, por lo que cancelaron la operación”, dijo Foster, quien está separado de la madre de Gracie y vive en Sheffield.

“Le diagnosticaron amigdalitis y me dijeron que no podían actuar. También estaba muy somnolienta, así que la enviaron a casa”.

Después de enviarla a casa y ver que su situación estaba empeorando, decidieron llevarla al otro hospital. Se dieron cuenta que empezó a tener otro tipo de manchas y en pocos minutos se convirtió en una erupción de cuerpo completo.

Los médicos lograron estabilizar a Gracie en cuidados intensivos, pero a las 10:15 pm, aproximadamente, el corazón de Gracie se detuvo. Hicieron todo para salvarla, pero esto no fue posible.

Ahora, el padre de Gracie Foster está compartiendo la desgarradora historia de su hija para crear conciencia de que un sarpullido puede ser el último síntoma de un niño con meningitis, y que en los hospitales deben hacerles todos los exámenes posibles para tener un diagnóstico seguro.