El adorable castor rescatado enseña cómo construir presas a partir de artículos para el hogar

Este tierno animalito quedó huérfano con 8 semanas de vida, pero fue rescatado y vive en casa de su salvadora. Nadie lo ha enseñado, pero su instinto le dice que debe fabricar represas con cualquier cosa que consiga. ¿No es eso lo que hacen los castores?

Bautizado "Justin Beaver" por sus protectores, JB, para los amigos, este simpático roedor se comporta como la mascota perfecta, aunque con algunas mañas de su especie, en la vivienda de Brigette Brouillard, ubicada en el centro rehabilitador de vida silvestre Second Chances Wildlife Center en Kentucky.

Según explicó Godtube, los castores suelen vivir con sus padres durante los dos primeros años de vida. Primero aprenden habilidades de castor y luego ayudan a sus padres a criar a sus hermanos.

Estos dos años son cruciales para que los castores obtengan habilidades de supervivencia muy necesarias, pero como JB no recibió este entrenamiento, nunca aprendió a ser un castor.

Por esta razón, carece de las habilidades necesarias para vivir en la naturaleza y no puede ser liberado. Mientras tanto, se gana la vida trabajando como embajador de la vida silvestre, en visitas a escuelas, bibliotecas y centros comunitarios.

También, el fotogénico castor protagoniza un video viral en YouTube con sus travesuras, que ha hecho las delicias de los amantes de los animales.

Y en casa, tiene mucha compañía. Nada más y nada menos que otros 250 animales, incluyendo ardillas, zarigüeyas, zorros y marmotas, pero los dos más ‘allegados’ son un armadillo y dos zorrillos.

Según Brouillard, hay algunas habilidades que JB no necesita aprender, porque son instintivas.

Entre ellas enumeró el mal humor a la hora de comer, masticar los muebles y, por supuesto, construir represas.

Un día, Brigette comenzó a notar que las alfombras de baño y otros artículos faltantes reaparecían en pilas alrededor de su casa.

Alfombras, zapatos, cepillos, lápices, cualquier cosa es buena para hacer sus obras de ingeniería.

Además, para vivir más como un castor, JB tiene su propio estanque en la bañera de la casa, donde se da unos relajantes baños que lo dejan como nuevo, después de su ardua tarea.

No obstante, consciente de que el adorable peludo requiere de un ambiente más apropiado y natural, Brouillard ha estado recaudando fondos adicionales para crearle un nuevo hábitat al aire libre.

Le hará mucha falta, pues se sabe que los castores pueden vivir unos 25 años en cautiverio, tiempo más que suficiente para convertirse en un verdadero castor y perfeccionar la construcción de sus represas.

¿Y quieren ver a un valiente animalito defendiendo a su mamá de sus “agresores’?

Pues un video en el que se ve a un sobreprotector bebé rinoceronte arremetiendo furiosamente contra aquellos que, para él, estaban queriendo hacerle daño a su adorada madre, está causando sensación en internet.