Pedófilo convicto afirma que 'Si un niño ya puede hablar, puede tener relaciones sexuales'

Jason Leonard apeló su prohibición de viajar al extranjero para poder visitar o mudarse a un lugar en donde la edad para tener relaciones sexuales sea menor a la de su país.

Autoridades de Haslingden han considerado a Jason Leonard como uno de los delincuentes sexuales más peligrosos de la región, tras escuchar sus declaraciones en su audiencia de apelación.

El sujeto, que tiene 37 años admitió sin tapujos frente a la corte que deseaba tener la libertad de ir a un país en donde la edad de consentimiento para tener relaciones sexuales sea menor, puesto que su pareja ideal sería una persona de entre las edades de 12 y 14 años.

Jason afirmó que los pedófilos en el Reino Unido están siendo perseguidos y comparó el trato que se les da con el de los homosexuales hace cuatro décadas.

No obstante, tras perder su apelación ante el tribunal, podrá exclusivamente viajar al extranjero si obtiene un permiso por escrito de un jefe de policía.

El ex convicto, quién pagó condena en la cárcel durante 32 meses desde el 2013, fue sentenciado luego de que se descubrió que poseía 251 imágenes indecentes de niños y que las compartía en la Internet.

Por consiguiente, una orden de prevención de delitos sexuales fue emitida con el fin de monitorear su uso de internet.

No obstante, la policía de Lancashire afirmó que esto no era suficiente para manejar su riesgo, por lo que los magistrados les otorgaron una orden de prevención de daños sexuales en abril de 2018.

En el documento se incluyen medidas adicionales que impiden que el sujeto tenga contacto no supervisado con menores de 16 años, sin permiso expreso de un padre, tutor o servicios sociales.

El ex convicto opinó que esa nueva orden era “completamente desproporcionada” y se molestó en hacer un llamamiento a Burnley Crown Court para que revocase tales medidas.

El detective Andrew Ashworth, quién maneja más de 90 delincuentes sexuales de Lancashire, afirmó ante la Corte que este hombre es uno de los delincuentes “más peligrosos que he conocido” y que representaba “un riesgo excepcional”.

“El señor Leonard es único. En los 10 años que llevo asumiendo esta responsabilidad nunca había visto a un delincuente sexual que reconozca abiertamente sus tendencias pedófilas. Él es excepcional y debe ser tratado como un gran riesgo”, afirmó el agente.

"El señor Leonard ha expresado su deseo de abandonar el país porque cree que la policía, la judicatura y el gobierno de este país están persiguiendo a los pedófilos", comentó.

"Él es muy elocuente con respecto a su opinión, y sostiene que está siendo perseguido, tal y como ocurrió con las décadas de los 70 y 80”, continuó.

Adicionalmente, explicó que Leonard cree firmemente que la pedofilia será aceptada de la misma manera en que ha sucedido con la homosexualidad, pero por lo pronto, ha expresado sus ganas de irse a otros países europeos que acepten estas prácticas.

En la audiencia de apelación quedó claro que él consume pornografía adulta muy orientada a los niños, en la que las modelos se encuentran vestidas como porristas o con uniformes escolares.

Luego de que se le cuestionó al exconvicto qué edad considera él demasiado joven para la actividad sexual, en marzo de 2018, Leonard respondió:

"Si un niño tiene la edad suficiente para hablar es lo suficientemente mayor como para tener relaciones sexuales".

El detective agregó que el hombre ha aceptado que su madre, con quien mantiene una estrecha relación, es un factor que lo frena en cuanto a su estilo de vida sexual, pero que cuando ella muera, se dirigirá al extranjero en busca de niños.

Stuart Kaufman, abogado de Leonard, dijo que las nuevas restricciones eran "completamente desproporcionadas, ya que su cliente cumplirá las leyes de cualquier país al que vaya".

"Si la edad de consentimiento es, por ejemplo, 15 años en Tailandia, entonces cumpliría esa ley. No hay nada en el registro del señor Leonard que sugiera que ha tenido actividad sexual con un niño. Lo único que ha hecho es descargar pornografía infantil”, aseguró el letrado.

La jueza Sara Dodd desestimó la apelación de Leonard y dijo que estaba "profundamente perturbado" y que tenía una "actitud francamente alarmante hacia la pedofilia".

Por lo pronto, la policía de Lancashire continuará administrando el riesgo de cualquier delincuente sexual registrado, poniendo especial atención a ese excepcional y único caso de gran riesgo.

¿QUÉ DICE LA GENTE?

El público en general se encuentra asqueado y sorprendido con las declaraciones de Jason, tal y como lo reflejan los comentarios de los usuarios de Facebook.

“Él mismo le dijo todo a la policía… esa declaración debería ser suficiente por si sola para encerrarlo durante 20 años”... opinó Bel Hennessy.

“¿Por qué esta criatura está respirando el mismo aire que yo?”, escribió Maxina Palmer.

“Me pregunto si este delincuente opinará lo mismo a que como es lo suficientemente mayor para hablar, entonces también lo es como para ser acosado sexualmente por un gran compañero de celda”, escribió Liz Cote.

“Hay muchas personas con problemas de salud mental que son simplemente malvados y no se supone que se mezclen con los seres ordinarios. Él necesita tratamiento, no una etiqueta, opinó Mary Agbettor.

OJALÁ FUESE EL ÚNICO

Al igual que Leonard, hay otro sujeto aún más repulsivo proveniente de South Auckland, que afirmó que todas sus víctimas “disfrutaron y querían” sus avances sexuales.

Se trata de Peter Brian Ashford, un anciano de 82 años que, hasta hacía dos años, seguía cometiendo atrocidades. Será encarcelado durante 12 años y ocho meses por orden del juez John Bergseng, en Nueva Zelanda.

Anteriormente se había declarado culpable de 27 cargos relacionados con niñas de entre 8 y 13 años, incluidos intentos de violación, violaciones sexuales y agresiones indecentes.

Comenzó a cometer abusos sexuales en los años 60 cuando tenía 30 años. Su primera víctima tenía solo 8 años, mientras que su segunda víctima fue abusada por tres años, en los años 80, comenzando cuando tenía 13 años.

Desde 2006 hasta después de cumplir 80 años en 2016, abusó sexualmente varias veces de un grupo de niñas de entre 8 y 11 años. A menudo, el abuso fue presenciado por otros niños.

Ashford le contó a la policía y a un escritor de un informe judicial que en el momento de la ofensa, los niños "disfrutaron y querían" sus avances sexuales y que solo les hizo "lo que pidieron".

El juez consideró que Ashford tenía dificultades para asumir la responsabilidad de sus acciones y que era muy propenso a minimizar su ofensa y tratar de culpar a las chicas, y con base en todos los factores ofensivos y agravantes, lo sentenció a 20 años de prisión.