Policía arrastra a 'discapacitado' por la calle porque descubrieron su treta

Un hombre que decidió estacionar su vehículo en un puesto reservado para personas con capacidades especiales, pero su tarjeta ya había caducado y, cuando las autoridades se percataron del hecho, decidió fingir una discapacidad.

Fue así como el sujeto optó por tirarse al piso ante los espectadores y transeúntes que no dejaron pasar por la alto la escena y decidieron grabarla con sus dispositivos móviles. Muchos de ellos lo compartieron en las redes sociales y la historia ahora ha sido vista por miles de personas.

El hombre se mostró agresivo y molesto e hizo toda su actuación tratando de dar a entender que no tenía capacidad para levantarse del piso.

Esto ocurrió en la calle Fuenterrabia de San Sebastián, España, en el centro de la ciudad. Transcendió que el protagonista de la escena vive en Ciudad Real y viajó a la ciudad por unos días.

Las autoridades verificaron que la tarjeta que lo identifica como discapacitado estaba vencida, por lo cual no tenía ningún beneficio para estacionar en el lugar.

“No me muevan que me pueden producir más lesiones”, dijo el hombre mientras permanecía tirado en el suelo.

Los funcionarios pararon el tráfico, mientras que uno de ellos trasladaba al hombre tirado hasta un lugar seguro.

Posteriormente, llamaron a una ambulancia para que el equipo evaluara el estado de salud del hombre, comprobando que se trataba de una dramatización y no padecía ningún tipo de discapacidad.

Debido a su actitud, se lo llevaron detenido y permaneció tras las rejas durante unas cuatro horas, luego quedó en libertad, pero con cargos.

Lo imputaron por delito de desobediencia y resistencia a las autoridades y alteración del orden público.

Este tipo de conductas es intolerable en cualquier parte del mundo y a veces no miden las consecuencias de sus actos, solo ven el beneficio propio.

En otra historia, una mujer en Tailandia informó que su esposo había muerto de cáncer y asma. El hombre le ocasionó dolor incluso a sus familiares cercanos al fingir su muerte.

El 14 de julio, Tachawit Janngiw le pidió a su esposa que le tomara fotografías y las publicara en Facebook para anunciar su muerte.

"La última foto antes de desactivar su Facebook, te amo", escribió la mujer. De inmediato, surgió una oleada de reacciones de apoyo, dolor y luto por parte de todos sus dolientes.

La esposa de Tachawit llamó a la madre del hombre para informarle de la situación y pedirle dinero para los gastos del funeral, el traslado de los "restos" a su pueblo y otros gastos.

La familia le transfirió a la "viuda" unos 600 dólares y empezaron a organizar el funeral. Sin embargo, la mentira no duró mucho tiempo. Cuando recibieron el cadáver, llamaron a la casa de la viuda para exigir explicaciones y escucharon la voz del “supuesto” muerto.

Por supuesto no consiguieron más que rechazo y exigencias de devolución de dinero.