Pareja halla ingeniosa forma de hacer que sus hijos vengan a visitar en Navidad

La risa definitivamente es la mejor medicina. Y es por eso que no puedes dejar de lado la importancia de relajarte un poco con un buen chistecillo de vez en cuando.

Estés teniendo un buen día o uno de los más pesados que recuerdas, la risa siempre cae de maravilla. Por eso, el día de hoy te traemos un cómico chiste para relajarte un poco, cortesía de Unijokes.

Una pareja de ancianos buscaba estrategias para hacer que sus hijos compartieran más tiempo con ellos, específicamente en Navidad, época de unión familiar y amor.

Sin pensarlo buscaron una manera de hacerlos llegar corriendo a casa y la sorpresa para ellos es que todo se trataba de una reunión familiar.

LA HISTORIA MÁS LOCA DE NAVIDAD

Un hombre en Escocia llamó por teléfono a su hijo en Londres, el día antes de Noche Buena, dándole unas perturbadoras noticias.

"Oye hijo, odio tener que arruinarte el día, pero tengo que decirte algo. Tu madre y yo vamos a divorciarnos, decidimos que ya cuarenta y cinco años de miseria son suficientes".

"Papá... ¿de qué demonios estás hablando?", gritó el hijo.

"Pues que no podemos soportar vernos ni en pintura, y ya es simplemente intolerable", dijo el padre.

"Estamos hartos el uno del otro, y es más, estoy harto de hablar de esto contigo así que llama a tu hermana allá en Inglaterra y cuéntale tú".

Profundamente perturbado, el hijo llamó a su hermana, quién estalló por teléfono. "¡Se divorciarán por encima de mi cadáver!", gritó. "¡Yo me encargo de esto!". Inmediatamente procedió a llamar a Escocia, y comenzó a gritarle a su padre.

"NO se van a divorciar. No hagan NADA hasta que yo llegue. Voy a volver a llamar a mi hermano, y los dos vamos para allá mañana. Hasta entonces, no hagan nada. ¿ME ESCUCHAN?", y colgó.

El viejo padre cuelga el teléfono y se voltea para ver a su esposa. "¡Listo! Vendrán para Navidad, ¡y ellos pagan el pasaje!".

OTRO CHISTECITO DE NAVIDAD

¿Quieres escuchar otro chistecillo? Pocos días después de Navidad, una madre estaba en la cocina y podía escuchar a su joven hijo jugando con un nuevo trencito eléctrico en la sala de estar.

Oyó al tren detenerse y a su hijo decir: "¡Todos ustedes miserables que quieran bajarse, bájense de esta piltrafa, porque es la última parada! Y todos ustedes mugrosos bastardos que se están subiendo, metan sus cochinos cuerpos en el tren, porque arrancamos ya".

La madre reventó contra su hijo. "¡No usamos lenguaje así en esta casa! Quiero que te vayas a tu cuarto y te quedes ahí por DOS HORAS. Cuando salgas, puedes jugar con el tren, pero tienes que hablar bonito".

Dos horas más tarde, el hijo salió del cuarto y siguió jugando con el tren. Al poco tiempo el tren se detuvo, y la mamá oyó al hijo decir:

"Todos los pasajeros que están apeándose del vehículo, por favor recuerden tomar todas sus pertenencias. Les agradecemos habernos elegido el día de hoy y esperamos que su viaje haya sido placentero. Esperamos que viajen con nosotros de nuevo pronto".

Oyó al niño continuar: "Para aquellos que están apenas abordando, les solicitamos almacenar todo su equipaje de mano bajo sus asientos. Recuerden, no se puede fumar en el tren. Esperamos que tengan un viaje placentero y relajante con nosotros el día de hoy".

La madre comienza a sonreír, pero entonces, el niño agregó: "Para aquellos que están reventados por tener que esperar DOS HORAS de retraso, denle las gracias a la desgraciada en la cocina".

Y si quieres reír aún más, te tenemos un gran chiste sobre un jefe que llama a todos sus empleados por su apellido, hasta que se encuentra a un sujeto que lo hace pensar dos veces sobre la aplicación de esa política, y puedes leer el chiste aquí.