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Artista italiano pelea con 'comida' contra neo-nazis

Stef Colina
24 oct 2018
03:10

Ante el resurgimiento de la derecha extrema en Italia, CIBO no pudo quedarse de brazos cruzados y combatió a los grupos fascistas con el arte de la comida local.

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Es difícil imaginar luchar contra los grupos neo-nazis con mozarella, tomates y unos cuantos tortellinis; pero Pier Paolo Spinazzè encontró la manera perfecta de hacerlo.

El artista de graffiti y amante de la comida, decidió aportar para una sociedad más tolerante, tapando los mensajes fascistas escritos en las paredes de su natal Verona.

"Hay esvásticas, celtas e insultos raciales como 'Quemar negros", dijo Spinazzè a VICE News y agregó que no pudo soportarlo más: "Llegué a un punto de inflexión y decidí eliminarlos todos", puntualizó el pintor.

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LA EXQUISITA ARMA CONTRA LA INTOLERANCIA

Pero CIBO (Que significa "comida" en italiano) no solo eliminó las esvásticas y los mensajes llenos de odio, usó uno de los recursos más famosos del país mediterráneo, su exquisita y vasta gastronomía.

A pesar de recibir constantes amenzas por parte de los militantes nazis, CIBO no se inmuta y continúa llenando de color y sabor las paredes de las calles de Verona, con imágenes de frutas y platos tradicionales de la región.

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Para Spinazzè, platos como la capressa simbolizan la unión y la mezcla cultural, y derrumba la idelogia nacionalista socialista.

LA GASTRONOMIA ITALIANA ES EJEMPLO DE INCLUSIÓN

"La albahaca proviene de la India, el aceite de Siria, la mozzarella es italiana y los tomates se originan en Colombia", argumentó el joven, quien perdió a uno de sus mejores amigos en 2008 a manos de estos extremistas.

"Espero haber sido un ejemplo para otros artistas, y que puedan encontrar soluciones en su ciudad para hacer que la sociedad sea más colorida y más humana", concluyó CIBO.

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El método que el italiano usa para ponerle freno a la violencia, el odio y la intolerancia en su país, es una de las maneras más efectivas de erradicar este problema, de acuerdo a lo que publica Jacques Atalli, quien asegura que la mejor manera de combatir la violencia es con arte.

EL ARTE ES LA MEDICINA AL ODIO

El arte es la expresión de nuestras pasiones humanas, las cuales encierran la belleza de vida y la riqueza de las culturas.

Por lo tanto, si las librerias y los museos pasaran más tiempo abiertos, o si hubieses más actividades artísticas en las comunidades, las personas estarían más interesadas en encontrarse a sí misma, en crear y en aprender, que lastimar a los demás.

La mayoría de los ciudadanos estaría trabajando en conjunto para hacer del mundo un lugar mejor.

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