Papá hizo a su hija sus queridos panqueques, pero tras probar solo un bocado ella falleció
Una pequeña de 9 añitos de edad falleció tras sufrir grave reacción alérgica al comer panqueques hechos por su padre.
Se trata de Nainika Tikoo, de Harrow, de Londres, y perdió la vida el 25 de mayo de 2017, cinco días después de comer el bocado de panqueque sin lácteos que su padre le había hecho después de regresar a casa, afirmó Mirror.
Tikoo sufría una serie de alergias, entre ellas, a los lácteos, pero aunque los panqueques no los contenían, ella colapsó y se puso azul antes de que los paramédicos la llevaran al hospital.
Trágicamente, se quedó sin oxígeno durante tanto tiempo que fue declarada con muerte cerebral, por lo que su padre, Vinod, y su madre, Lakshmi, tomaron la difícil decisión de desconectarla de su soporte vital.
Su madre confesó no haber entendido que significaba la muerte cerebral.
“Estaba pensando en la parálisis o la discapacidad, pero que ella se recuperaría con el tiempo. La llevaron a la UCI y nos dijeron que no se veía bien, pero aún pensaba que sería tratada y mejoraría”, relató Lakshmi.
Desde siempre Nainika había luchado contra las alergias, pero nunca fueron consideradas de alto riesgo.
Primero notaron que la niña reaccionaba a ciertos grupos de alimentos después de que le dieron leche de arroz como parte de una ceremonia tradicional hindú, a los seis meses de edad.
Una prueba confirmó que era sensible a la soja y alérgica a los productos lácteos y los huevos. Más tarde le diagnosticaron asma, pero no fue hasta finales de 2015 que sufrió una reacción severa después de comer chocolate con leche en la escuela.
Luego se le recetó inyecciones de epinefrina y se le enseñó a usarlas cuando tuviese que hacerlo, pero a ninguno de los padres se le dio una capacitación formal, y se le encomendó a Lakshmi que informara a su esposo qué hacer.
Antes de desconectar a la niña, le realizaron una prueba y descubrieron que era ligeramente alérgica a las moras.
"El médico dijo que parecía que no era la mora en sí misma, pero que tenía algo que ver con los productos lácteos (..) Los panqueques eran sin lácteos, pero no estamos seguros si los ingredientes estaban contaminados o algo así. No teníamos ningún producto lácteo en casa. La causa exacta es desconocida y nos ha dejado muchas preguntas", dijo Lakshmi.
Cinco meses después, ambos comenzaron un fondo al nombre de su hija para asesorar a los padres cuyos hijos tienen alergias, así como para crear material de concientización.
“Creamos una página de JustGiving, para que la gente pueda donar dinero en lugar de flores para el funeral. Nos sorprendimos cuando recaudamos alrededor de $ 2,500 en una hora. Luego aumentamos el objetivo y seguimos superándolo. Recaudamos un total de $ 18,000.
Desde la muerte de Nainika, la pareja se dio cuenta de que muchos padres están luchando contra las alergias de sus hijos y ellos necesitaban hacer algo para ayudar.
Tenían el deseo de crear material de sensibilización, contribuir a proyectos de investigación y simplemente difundir el mensaje.
“No sabemos si podríamos haber hecho algo para prevenir la muerte de Nainika, pero podemos asegurarnos de que padres sepan dónde obtener ayuda y que podamos evitar que esto suceda a otra familia”, relató la desconsolada mamá.
GALLETAS MATARON A ESTA CHICA
En un caso similar, Alexi, una adolescente de 15 años, falleció por un sincero error el 25 de junio de 2018.
Según su dolida madre, Kellie Travers-Stafford, la niña era fuertemente alérgica al maní y el día de su muerte fue a casa de un amigo.
Estando allí, decidió probar lo que creyó que sería una simple galleta con chispas de chocolate; pero resultó ser una galleta Chips Ahoy! Chewy. Alexi reconoció el paquete rojo y, gracias a investigación previa, sabía que las galletas de esa edición no contenían maní.
Resulta que la joven se comió una de las galletas, pero eso resultó ser un error mortal.
Alexi sintió un cosquilleo en la boca y se fue a casa de inmediato. Sus síntomas empeoraron rápidamente y comenzó a sufrir un choque anafiláctico.
Sus padres le aplicaron dos inyecciones de epinefrina mientras esperaban a los paramédicos, pero, eventualmente, la chica perdió la consciencia y hasta dejó de respirar. Sólo tomó 90 minutos para que los cacahuates actuaran en su cuerpo.
La joven no soportó la alergia y falleció.