Trabajador social tenía una vida austera, pero a su muerte hizo increíble donación a caridad

Alan Naiman era un trabajador social de la ciudad de Washington bastante reservado, solitario pero abnegado, debido a una enfermedad Alan murió y dejó una herencia increíble.

Alan murió a la edad de 63 años, el no tenía familia por lo tanto no tenía a quien dejarle el dinero que tenía ahorrado, pero lo más increíble es la cantidad de bienes que guardaba Naiman, la exorbitante suma de 11 millones de dólares.

Es difícil pensar que un trabajador de servicios sociales pueda amasar tamaña fortuna pero el hombre tuvo varios trabajos durante su vida y aparentemente era muy buen ahorrador.

SU CORAZÓN ERA MÁS GRANDE QUE SUS AHORROS

El hombre antes de trabajar de servidor social trabajo en un banco por un tiempo, pero las dos últimas décadas Alan fue un fiel trabajador en pro de ayudar a los más necesitados.

Alan ahorró de manera asombrosa para juntar ese dinero, que maravillosamente donó a varias organizaciones de ayuda a los necesitados, una de estas organizaciones es la Pediatric Interim Care Center.

Esta organización privada en el estado de Washington atiende a bebés de mujeres que abusaron de las drogas y ayuda a los niños a dejar su dependencia, Naiman les dejo $ 2.5 millones.

Naiman también le dio $ 900,000 a la organización de cuidado de crianza Treehouse, el popular almacén del grupo, donde los barrios del estado pueden elegir juguetes y artículos de primera necesidad gratis.

UN HÉROE SIN CAPA

Alan con su bondad ha ayudado a un sin número de niños y personas desvalidas, quienes están a cargo de las organizaciones que el ayudo, no salen del asombro ni dejan de agradecer al buen samaritano lo grandioso de su aporte.

La fundadora del Pediatric Interim Care Center Bárbara Drennen comentó a Wfny, Nunca soñariamos que algo así nos sucedería. “Desearía mucho haber podido conocerlo, me hubiera encantado que él viera a los bebés que está protegiendo”.

“La frugalidad que vivió, a la que se comprometió en su vida, fue por esto”, dijo Jessica Ross, directora de desarrollo de Treehouse. “Es realmente un regalo para todos nosotros ver esa demostración pura de filantropía y amor", finalizó Jessica.

Treehouse usará el dinero donado por Alan para expandir su orientación universitaria y profesional en todo el estado, Naiman ha hecho algo que pocas personas harían, quizás ninguna, la magnitud de lo realizado por el se notará más con el pasar de los años y dejará en.una huella en una gran cantidad de personas.

En una historia similar, dos mujeres decidieron iniciar su propia campaña de recaudación de fondos para ayudar a las personas con deudas médicas en Nueva York.