Julio Iglesias y Javier Sánchez Santos: historia del hijo que el cantante tendrá que reconocer
Tras tres décadas de luchar por ser reconocido como su hijo, finalmente la justicia de Valencia dictaminó que Julio Iglesias es padre biológico de Javier Sánchez Santos.
A pesar de la renuencia que el famoso intérprete español ha tenido para dar una muestra de ADN que ayude a aclarar la demanda que la madre de Javier Sánchez Santos hizo en 1992, asegurando que su hijo era producto de una relación con él, el juez José Miguel Bort le dio la razón.
En julio de 2019, el Juzgado de Primera Instancia número 13 de Valencia declaró que Javier es hijo de Julio Iglesias, tiene el derecho a usar su apellido si lo cree conveniente y tiene derecho a disfrutar de una parte de la herencia.
"Habemus sentencia: el juez me declara hijo biológico de Julio Iglesias", escribió Javier Sánchez Santos a través de su cuenta de Instagram.
Con esa sentencia, Javier pasa a ser el noveno hijo oficial de Julio Iglesias, quien tiene tres hijos con Isabel Preysler, Chabeli, Julio y Enrique, y cinco más con su actual esposa, Miranda Rijnsburger: Miguel, Rodrigo, Victoria, Guillermo y Cristina.
Según Fernando Osuna, abogado de Sánchez, la sentencia final a favor de su cliente se dará en los proximos días, debido a que la situación de crisis que se vive a raiz de la pandemia por el COVID-19 provocó la suspensión de la audiencia pautada para el 22 de abril.
AVENTURA AMOROSA
En julio de 1975, la entonces bailarina María Edite Santos, nacida en Portugal y Julio Iglesias tuvieron un encuentro amoroso en Cataluña. El cantante estaba casado con Isabel Presley.
En abril de 1976, nacería el pequeño Javier, y un año después su madre conocería y se casaría con Rafael Sánchez, quien lo adoptó legalmente, dándole su apellido.
En 1992, María Edite apareció ante los medios de comunicación para hablar sobre su aventura con el famoso cantante. Junto a ella estaba su hijo, que tenía 15 años en ese momento y se parecía mucho al artista. En ese momento comenzó su lucha para comprobar la paternidad de Iglesias.
Ese mismo año, un tribunal falló a favor de Javier y declaró que Iglesias era su padre. Pero Iglesias apeló y consiguió anular el fallo. El cantante se había negado a someterse a una prueba de paternidad.
En 2017, Javier y su abogado Fernando Osuna presentaron una prueba de ADN que obtuvieron en Miami con artículos de desecho de un pariente directo de Iglesias, cuyo resultado comprobaría con un 99,9% de precisión que en efecto es su padre, y anunciaron que introducirían una nueva demanda de paternidad contra Iglesias.
"Me tomó 27 años obtener evidencia de ADN que mi padre biológico siempre ha rechazado", dijo Sánchez. "Esta evidencia indica con una precisión del 99.9 por ciento que soy su hijo y que mi madre siempre ha dicho la verdad", agregó.
UNA DURA INFANCIA
Sánchez creció con su madre y su padrastro, que era cocinero, en el distrito costero de la ciudad de Valencia, entre los barrios de El Cabanyal y La Malva-Rosa.
La infancia de Sánchez fue dura, al crecer en una zona con graves problemas de delincuencia y drogas, entre ellas la heroína. El joven ha revelado sobre las dificultades que tuvo que superar cuando era niño.
Luego de la revelación pública de su parentesco con Iglesia, el joven apareció en varios programas de televisión y en revistas de prensa rosa, explicando que se sentía herido "por la actitud” de su padre.
Posteriormente, Sánchez intentó hacer una carrera en la industria musical, pero una vez que la novedad de su reclamo se desvaneció, su carrera cayó en picada. Su trabajo incluye álbumes con títulos como Soy como tú (1995) y Lucha y verás (1999).