"Ahora quiero dar las gracias": primera entrevista del padre de Julen tras la muerte de su hijo
José, en medio de su dolor agradece todos los esfuerzos realizados por la Guardia Civil para hallar a su hijo, aunque el desenlace haya sido fatídico.
La pérdida de un hijo es indudablemente algo irremediable, el dolor que alberga a la familia Rosello es notorio y es que ahora no contaran con las risas del chiquito de casa, su pequeño Julen.
Un triste 13 de enero Julen cayó en un pozo a 71 metros de profundidad y a pesar de los trabajos de excavación que se realizaron para rescatarlo con vida. Aunque no se logró el objetivo, cientos de personas entregaron su mejor esfuerzo para llegar al niño de 2 años y por eso, su padre se siente agradecido.
UN CUERPO SIN ALMA
La desesperante tarde del 13 el corazón de José se quebró en pedazos y nada más podrá repararlo, pues la ausencia de Julen nadie podrá llenarla.
Sin embargo, en pleno duelo, solo le queda agradecer a todos los que colaboraron con aínco y dedicación en la búsqueda de su hijo.
La Guardia Civil, periodistas, bomberos, mineros, ingenieros, operarios, psicólogos, emergencias 112, voluntarios de Protección Civil, vecinos de Totalán, de El Palo, la mujer les prestó la casa, el coronel Jesús Esteban y la subdelegada María Gámez, fueron los protagonistas del agradecimiento de José.
"Igual que salí para pedir más medios para buscar a mi hijo, ahora quiero hacerlo para dar las gracias. No quiero más entrevistas. Sólo trasladar ese agradecimiento, y que no quede la queja", confesó el hombre según Diario Sur.
"Nos hemos sentido muy arropados; aunque el dolor no me lo quite nadie, estaré eternamente agradecido por eso", agregó el hombre de 29 años.
Aunque muchas incógnitas envuelven la muerte del chiquillo, pero ahora toca esperar lo que determinen las investigaciones.
AGRADECIMIENTO A PESAR DEL DOLOR
"Eternamente agradecidos a la Guardia Civil, bomberos, mineros, ingenieros, operarios, psicólogos, Emergencias 112, voluntarios de Protección Civil, vecinos de Totalán, de El Palo”, agregó Roselló.
Así también destacó que no hay palabras para la mujer que cedió su casa y las autoridades Jesús Esteban y María Gámez por escuchar sus quejas y protestas y sobre todo por el trato que le han conferido, publicó 20 minutos.
Y es que el dolor está allí latente y nadie podrá imaginar lo que es vivir para enterrar a sus hijos como José y Vicky tuvieron que hacerlo.
ENTERRANDO A SU SEGUNDO HIJO
José y Vicky han pasado por este dolor antes, en 2017 enterraron al pequeño Óliver y manifestaron que antes vivían con sus familiares y tuvieron que mudarse de allí porque los recuerdos lo abrumaban.
"Antes, vivíamos con mi familia, pero cuando pasó lo de Óliver (su primer hijo, quien murió en 2017) nos tuvimos que ir porque todo eran recuerdos. Y ahora igual. Entras y empiezas a ver muñecos, pelotas", relató el afligido hombre, quien atormentado por la culpa afirma ver el pozo cada vez que cierra los ojos.