Mujer demuestra gran fuerza espiritual al llevar a término a hija moribunda para donar sus órganos

Las válvulas cardíacas fueron donadas a unos niños y los pulmones de Rylei se otorgaron a un hospital de investigación luego su fallecimiento.

Krysta Davis, madre de la niña, descubrió que la bebé tenía una anormalidad a las 18 semanas de embarazo.

Davis explicó que se encontraban bastante sorprendidos de que se haya mantenido viva durante toda una semana. El diagnóstico fue anencefalia, una anomalía en la que faltan varias partes del cerebro o del cráneo.

NACIDA EN NOCHEBUENA CON UNA NOBLE MISIÓN

Debido a esta enfermedad, la bebé no sobreviviría más de 30 minutos luego de su nacimiento, por lo que sus padres ya estaban preparados para lo peor.

Los médicos solo dieron dos opciones, inducir el parto de inmediato o llevarlo a término para donar los órganos.

La segunda opción fue la tomada por la madre, por lo que durante Nochebuena nació la pequeña Rylei, que en palabras de su madre nació con los ojos viendo hacia el cielo, y supo que jamás amaría tanto a alguien como a aquella pequeña.

Su nacimiento fue todo un milagro y desde que la pusieron en los brazos de su madre comprendieron que tenía una noble misión por hacer.

EL MILAGRO DE LA VIDA

Todos sabían que la pequeña no sobreviviría, pero como si de un milagro se tratara, ella lo logró y durante toda una semana sus padres pudieron disfrutarla hasta su último suspiro dado en víspera de Año Nuevo.

Su corto período de vida Rylei lo vivió siendo un bebé muy sonriente, y pudo regalar hermosos momentos de alegría a sus padres y posteriormente les otorgó la vida a otros pequeños mediante la donación de sus órganos.

La misión de esta pequeña en el mundo fue ser portadora de esperanza a otros niños y su historia se escribió para crear futuras investigaciones sobre esta enfermedad.

Una historia igual de desgarradora es la de Kristy Watson, quien perdió a su bebé a causa de una grave condición llamada preeclampsia.

A pesar de presentar algunos síntomas los doctores los calificaron como algo normal, sin embargo con 32 semanas casi muere a causa de la preeclampsia que sus médicos no lograron identificar a tiempo, y que se cobró la vida de su bebé.

Ahora Kristy se encuentra ayudando a otras madres, enseñándolas a exigir respeto y apoyo médico cuando lo necesiten para que su historia no se vuelva a repetir.